Autoridades militares de Estados Unidos anunciaron el retorno a sus cuarteles de las militares que fueron llevados de manera apresurada a la frontera con México como parte de las advertencias del Presidente Donald Trump ante el avance de la sobre una caravana migrante en busca de asilo, informó el sitio Politico.
Luego de que demócratas y republicanos criticaran el despliegue como una estrategia del Mandatario para usar las Fuerzas Armadas como un apoyo para contener las pérdidas en las elecciones intermedias del 6 de noviembre, el retiro de los militares podría alimentar aún más las afirmaciones de que el Ejército fue utilizado con fines políticos.
El general teniente general del Ejército Jeffrey Buchanan, quien supervisa el despliegue, señaló al sitio Politico este lunes que las primeras tropas comenzarán a regresar a sus cuarteles en los próximos días, ya que algunas ya no son necesarias una vez que completaron las misiones para las que fueron enviados.
Los miembros del servicio que regresan incluyen unidades de ingeniería y logística cuyos trabajos se enfocaron en la colocación de alambres de púas y otras barreras para limitar el acceso irregular en la frontera de Estados Unidos y México.
Se espera que todo el Ejército deba estar en sus cuarteles para Navidad, como se esperaba originalmente, indicó Buchanan.
«Nuestra fecha de finalización en este momento es el 15 de diciembre, y no tengo indicaciones de nadie de que vayamos más allá de eso», señaló el funcionario militar que encabeza las fuerzas terrestres del Comando Norte de Estados Unidos.
La decisión de comenzar a retirarse se produce pocas semanas después de que el Presidente Donald Trump ordenara el despliegue altamente de tropas en la línea fronteriza.
En casos anteriores donde los militares se desplegaron para reforzar la frontera, los refuerzos consistían en militares de la Guardia Nacional de tiempo parcial bajo el mando de Gobernadores estatales que respaldaban las labores de las dependencias encargadas de la seguridad fronteriza.
Pero las tropas recién desplegadas, la mayoría desarmadas y de unidades de apoyo, provienen del servicio militar activo, una concesión que el Pentágono hizo después de que el Mandatario insistiera en que el despliegue incluyera no solo a la Guardia Nacional.
Buchanan confirmó a Politico los reportes anteriores sobre que los militares habían rechazado una solicitud del Departamento de Seguridad Nacional de una fuerza armada para respaldar a los agentes de la Patrulla Fronteriza en caso de una confrontación violenta.
«Esa es una tarea de aplicación de la ley, y el secretario de Defensa no tiene la autoridad para aprobar eso dentro de la patria», señaló Buchanan.
En tanto, el funcionario militar señaló que el cierre de un punto de entrada la mañana de este lunes en la frontera de California cerca de Tijuana, México, fue solo parcial y no requirió medidas más drásticas.
«Alrededor de la mitad de los carriles estaban cerrados esta mañana, pero eso es todo (…) No hay cierres completos», señaló Buchanan.
Sin embargo, señaló que otros puntos de entrada podrían cerrarse completamente en el futuro, pero no detalló sobre ninguna necesidad de tomar medidas más drásticas.
Foto de AP.