La planta de algodón que brotó en la minibiósfera sellada a bordo de la misión Chang’e 4 de China ha sucumbido al frío extremo producido cuando el Sol se puso en la cara oculta de la Luna.
El 3 de enero, el programa de exploración lunar Chang’e-4 de China llevó la planta a la Luna en una carga útil diseñada para crear el primer microecosistema en el único satélite natural de la Tierra.
Días más tarde, se anunció que la planta de algodón incluida en dicho experimento había germinado.
La temperatura durante la noche de dos semanas en la Luna puede ser tan fría como – 170 grados Celsius, bajo la cual el brote de algodón no tenía ninguna posibilidad de supervivencia.
El contenedor sellado con el experimento tiene un sistema de calefacción para mantener la semilla caliente, y por eso brotó en primer lugar. Pero se apagó después de que el módulo de aterrizaje Chang’e-4 ingresara al modo de suspensión para ahorrar energía el 13 de enero.
«Durante las 212,75 horas desde el encendido hasta el apagado, la carga útil funcionó bien. Algunos de los resultados superaron nuestras expectativas», explicó Xie Gengxin, el diseñador y decano de este experimento en el Instituto de Tecnología Avanzada de la Universidad de Chongqing, responsable del experimento.
El experimento transmitió más de 170 imágenes a la Tierra. La última fotografía se tomó el 12 de enero, lo que mostró que el brote estaba creciendo de manera saludable. «Hemos obtenido una cantidad masiva de datos valiosos en este experimento», agregó Xie, citado por CGTN.COM.
El equipo también insinuó que el experimento no es tan ambicioso como algunos pensaron. «El objetivo principal era la divulgación de la ciencia», dijo Liu Hanlong, líder del experimento y jefe adjunto de la Universidad de Chongqing.
La idea de una carga útil biológica se seleccionó a partir de 257 sugerencias recopiladas de estudiantes de secundaria y universitarios en 2016.
Minibiosfera simple
La sonda Chang’e-4 transportó en el contenedor sellado semillas de algodón, colza, patata y arabidopsis, así como huevos de mosca de la fruta y algunas levaduras, para formar una minibiosfera simple.
Así, las plantas generarían oxígeno y alimento para que otros seres vivos «consuman». La drosophila melanogasters, como consumidores, y la levadura, como descomponedores, generarían dióxido de carbono al consumir oxígeno para la fotosíntesis de las plantas. Además, la levadura puede descomponer los residuos de plantas y drosophila melanogasters y crecer, y también puede servir como alimento de drosophila melanogasters.
Con este círculo, se forma una mini biosfera compuesta por productores, consumidores y descomponedores. El desarrollo y la preparación del módulo biológico fueron realizados por el Equipo de Investigación de Biología Espacial en la Escuela de Ciencias de la Vida de la Universidad de Chongqing.