Lugar:
Fuente:
La Razón

Hace 17 años, Tom Brady tenía 24 años de edad y estaba en su segunda temporada en la NFL, cuando llevó a los Patriots a una victoria de último segundo sobre los Rams de San Luis para el primer título de Super Bowl de Nueva Inglaterra.

Con cuatro anillos de campeón más, Brady llegará a Atlanta para el Super Bowl entre los Patriots y los Rams – ahora de Los Ángeles – establecido por sí mismo como el quarterback más ganador en la historia del juego por el título de la NFL.

Pero mientras Brady se prepara para jugar en su noveno Super Bowl, tendrá otra oportunidad de hacer algo que nadie más ha logrado en la liga.

Si Nueva Inglaterra vence a Los Ángeles, el quarterback de 41 años romperá el empate que sostiene con el legendario defensive end Charles Haley y se convertirá en el primer jugador con seis anillos de campeón.

Sin embargo, para sus entrenadores, compañeros y admiradores, él ya está solo como el mejor.

Conocido por Brady afectuosamente como “Jules”, el receptor Julian Edelman llamó un honor ser parte de la carrera del galardonado quarterback.

“Realmente es un buen jugador de fútbol (americano)”, dijo Edelman. “El mejor. Y sale y constantemente lo demuestra”.

El tight end de los Patriots, Rob Gronkowski, ha atrapado más pases de Brady que ningún otro jugador y participará a su lado en un Super Bowl por cuarta ocasión. Señaló que el enfoque de Brady ha sido el mismo desde su primer entrenamiento juntos en 2010.

“El tipo es tan preciso en todo. Justo de la manera que sale al campo, la forma en que se prepara”, comentó Gronkowski. “Sabes cada vez que vas a tener lo mejor de él sin importar cuáles sean las situaciones”.

Tras la victoria de Nueva Inglaterra sobre los Chargers en la ronda divisional, Brady fue abiertamente molesto sobre lo que percibió como pesimismo fuera del vestidor de los Patriots respecto a sus oportunidades de alcanzar un tercer Super Bowl consecutivo luego de una temporada regular que inició 1-2 y en la que perdieron cinco encuentros.

“Sé que todos piensan que apestamos y, tú sabes, que no podemos ganar ningún juego”. Declaró Brady. “Ya veremos. Será divertido”.

Una semana después, Brady guió a los Patriots a una serie ofensiva ganadora en tiempo extra para vencer a los Chiefs de Kansas City en el juego de campeonato de la Conferencia Americana (AFC por sus siglas en inglés), su 12ma serie de ese tipo en postemporada en un último cuarto o tiempo extra.

Esta postemporada Brady ha sido más abierto con sus emociones y reconoció tras el triunfo en la final de la AFC que estaba “tan emocionado como no había estado en mucho tiempo”.

“Cuando tienes a 70,000 personas gritando en tu contra, es muy dulce cuando ganas en gira”, agregó Brady.