Joseph Firth, científico de esta institución universitaria y del Instituto de Investigación en Salud de la Universidad de Sydney, reunieron todos los datos existentes de ensayos clínicos de dietas para afecciones de salud mental. La investigación proporciona evidencia convincente de que la mejora de alimentación, reduce significativamente los síntomas de la depresión, incluso en personas sin trastornos depresivos diagnosticados.
En un comunicado, la Universidad de Manchester destacó que adoptar una dieta saludable puede mejorar el estado de ánimo de las personas, aunque precisó que se requieren más análisis para demostrar si tienen efectos sobre la ansiedad.
El análisis de datos de casi 46 mil personas, encontraron que las dietas para perder peso, aumentar los nutrientes y reducir la grasa pueden reducir los síntomas de la depresión. Incluyeron datos de casi 46 mil personas y los combinaron con 16 ensayos que examinaron los efectos de las intervenciones dietéticas sobre los síntomas de depresión y ansiedad.
Reportaron que todos los tipos de mejoría en la dieta parecían tener efectos iguales en la salud mental, con dietas para perder peso, reducir la grasa o mejorar los nutrientes, todos con beneficios similares para los síntomas depresivos.
“Hacer cambios simples es igualmente benéfico para la salud mental, en particular, comer comidas más ricas en nutrientes, fibra y verduras, mientras que reducir las comidas rápidas y los azúcares refinados parece ser suficiente para evitar los efectos psicológicos potencialmente negativos de una dieta de “comida chatarra“, informaron.
En conjunto, los datos destacaban el papel central de comer una dieta más saludable y hacer ejercicio regularmente para actuar como un tratamiento viable para ayudar a las personas con bajo estado de ánimo. No obstante, precisaron que la investigación existente no ha podido establecer definitivamente si la mejora de la dieta podría beneficiar la salud mental.