El Fondo Monetario Internacional (FMI) aseguró este jueves que aún está analizando el reconocimiento del líder de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, como presidente encargado de Venezuela, ya que los países miembros “todavía están estableciendo su posición”.
“Los países miembros todavía están estableciendo su posición de reconocimiento (de Juan Guaidó como presidente). Es una situación fluida”, indicó Gerry Rice, portavoz del FMI en una rueda de prensa.
“Seguimos en el proceso de consultas”, remarcó el portavoz. Guaidó se proclamó presidente interino de Venezuela el pasado 23 de enero, y posteriormente recibió el respaldo de Estados Unidos, y de la mayoría de países de Europa y América Latina, que instaron a la celebración de elecciones.
Sin embargo, Rusia y China, así como México y Uruguay, han evitado reconocerlo como presidente encargado y han reiterado que el actual mandatario Nicolás Maduro es el gobernante legítimo. En su primer comentario al respecto, días después de la proclamación de Guaidó, el FMI señaló que se guiaría por “la comunidad internacional” a la hora de reconocerle como presidente venezolano.
Preguntado sobre posibles conversaciones con el Gobierno interino de Venezuela, que ya ha designado a Carlos Vecchio como “embajador” en Washington con el visto bueno de Estados Unidos, Rice aseguró no tener “noticia de contactos”. Tampoco, agregó el portavoz del FMI, sobre conversaciones con el gobierno de Maduro.
De cara a un posible programa de asistencia financiera para estabilizar la crítica situación económica del país, que acumula años de contracción e hiperinflación, Rice insistió en que es aún “prematuro” dado que “el primer paso es el reconocimiento” de las autoridades al cargo del país. Aunque, añadió, “claramente hay una serie de posibles herramientas disponibles” para la asistencia. A comienzos de semana, David Lipton, “número dos” del FMI, indicó que la dramática situación económica de Venezuela exigirá “un generoso apoyo externo”, sin ofrecer más detalles.
A finales del pasado año, el FMI recibió por primera vez en años datos oficiales por parte del Banco Central de Venezuela, después de que el organismo emitiera una declaración de censura contra el país por no entregar información económica como se requiere a sus países miembros. El Directorio Ejecutivo tenía previsto reunirse a comienzos de año para analizar estos datos, pero Rice indicó que va a esperar a que se “clarifique” la situación política en Venezuela para valorarlos.