Déjalos envejecer con el mismo amor con el que ellos te dejaron crecer. Déjalos hablar y contar repetidas veces historias, con la misma paciencia e interés que ellos escucharon las tuyas cuando eras niño. Déjalos vencer, como tantas veces ellos te dejaron ganar. Déjalos disfrutar con sus amigos, de las charlas con sus nietos. Déjalos equivocarse, como tantas te has equivocado tú. DEJALOS VIVIR y procura hacerlos felices el ultimo tramo del camino que les falta por recorrer, del mismo modo que ellos te dieron la mano cuando iniciabas el tuyo. Es de «Ignis Natura» y lo subió Gerardo García E. al Facebook. Imagen de «Pinterest».