El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, dijo el lunes que su país está preparando 56 millones de dólares adicionales en ayuda humanitaria para Venezuela y pidió a los aliados latinoamericanos que aumenten la presión sobre el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
“Hacemos un llamado a todas las naciones del Grupo de Lima para que congelen de inmediato los activos de PDVSA. En segundo lugar, transferir la propiedad de los activos venezolanos en su país de los secuaces de Maduro al gobierno del presidente Guaidó”, agregó Pence en una reunión del Grupo de Lima, en Bogotá.
También hizo un llamado a los países a que restrinjan las visas a los funcionarios cercanos a Maduro y que reconozcan a Juan Guaidó, el presidente interino de Venezuela, como representante del país sudamericano en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).