China usó este viernes un tono más agresivo en su guerra comercial con Estados Unidos, y sugirió que reanudar las conversaciones entre las dos mayores economías del mundo no tendrá sentido a menos que Washington cambie el rumbo.
Las duras palabras coronan una semana en la que Beijing anunció represalias arancelarias, luego de que funcionarios estadounidenses acusaron a China de dar marcha atrás en las promesas hechas durante meses de conversaciones y de que el gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, asestó un golpe devastador contra una de las compañías más grandes y exitosas del gigante asiático.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lu Kang, consultado por reportes de medios que sugieren que no habrá más conversaciones entre China y Estados Unidos, dijo que su país siempre está a favor de resolver las disputas mediante diálogos y consultas.
«Pero dado que ocurrieron algunas situaciones del lado estadounidense durante consultas previas sobre comercio entre China y Estados Unidos, creemos que para que estas negociaciones sean significativas tiene que haber sinceridad», agregó en una conferencia de prensa.
Estados Unidos provocó el jueves la ira de Beijing al colocar al gigante de telecomunicaciones Huawei, una de las compañías chinas más exitosas, en una lista negra que podría complicar severamente la capacidad de la empresa de hacer negocios con firmas estadounidenses.
China aún no ha dicho si tomará represalias o cómo lo hará, pero medios estatales han adoptado un tono cada vez más estridente.
El diario del Partido Comunista publicó un comentario en su portada evocando el espíritu patriótico de guerras pasadas. «La guerra comercial no puede derribar a China, sólo nos endurecerá para hacernos más fuertes», dijo.
Golpe a los mercados
La creciente disputa comercial ha sacudido a los inversores que temen que los países estén avanzando por un camino que dañe gravemente las líneas de suministro global y frene una economía mundial que ya se está desacelerando.
El South China Morning Post, que citó a una fuente que no identificó, reveló que un miembro importante del Partido Comunista de China pronosticó que la guerra comercial podría reducir el crecimiento económico de China en 2019 en un punto porcentual en el peor escenario.
El yuan cayó el jueves a su menor nivel en casi cinco meses, aunque las pérdidas fueron contenidas luego de que fuentes declararon a Reuters que el banco central se asegurará de que la moneda china no sobrepase el umbral de 7 unidades por dólar en el corto plazo.
Las dos mayores economías del mundo están embarcadas en una guerra arancelaria cada vez más agresiva que las ha llevado a elevar mutuamente los gravámenes sobre sus bienes importados, incluso mientras negocian.
Puede esperarse que China empiece a hacer preparativos para una guerra comercial de largo plazo con Estados Unidos, indicó un funcionario chino cercano al asunto.
«De hecho, este es un momento importante, aunque no un momento existencial de vida o muerte.
«En el corto plazo la situación comercial entre China y Estados Unidos será severa, y habrá desafíos. Ninguno de los caminos será fácil en el largo plazo. Esto llevará a China a hacer los preparativos adecuados para el futuro», dijo el funcionario.
El impacto de las hostilidades comerciales en la economía de China es «controlable», señaló este viernes el organismo de planificación estatal NDRC (por sus siglas en inglés), que prometió tomar las acciones necesarias para contrarrestar cualquier dificultad, según la portavoz Meng Wei.