COLUMNA INVITADA
Marco Antonio Baños
El próximo domingo se abrirán las urnas en seis entidades federativas que eligen en conjunto 148 cargos. Baja California renueva gubernatura, cinco ayuntamientos y 25 diputaciones; Puebla, luego del lamentable fallecimiento de su gobernadora, define también gobierno estatal y cinco ayuntamientos; en ayuntamientos Durango renueva 39 y Aguascalientes 11; mientras que en diputaciones Tamaulipas 36 y Quintana Roo 25.
En Baja California no hay todavía un pronunciamiento jurisdiccional definitivo respecto de cuánto durará el cargo de gobernador, si sólo dos años como estaba previsto para armonizar calendarios comiciales o seis años, como ha pedido el tribunal electoral local en primera instancia. Es una entidad donde el árbitro local hizo un gran esfuerzo para generar espacios de debate entre candidaturas. Organizó tres, uno en Tijuana, otro en Mexicali y el último, el lunes pasado, en Ensenada.
Por primera vez en la historia electoral del estado, los formatos fueron más abiertos, con periodistas con prestigio y trayectoria crítica, como la directora del semanario Zeta, Adela Navarro, quienes hicieron preguntas para que se contrastaran y precisaran ofertas al gobierno estatal, pero encontraron que el candidato al que las encuestas señalan como puntero sencillamente no se presentó, desairó todos los debates, generando un precedente lamentable para estos ejercicios que poco a poco han venido arraigándose.
En Puebla tuvimos debate con todos los candidatos hace una semana, aunque los tiempos reducidos para ese proceso especial que se vive en la entidad fueron propicios para un solo cara a cara y no tres como en Baja California.
De cualquier forma, tanto en esos procesos en curso donde está en juego la gubernatura, como los del resto de entidades que renuevan diputaciones y ayuntamientos, ninguna fuerza política se ha quedado sin oportunidad de exponer de manera individual, en medios masivos, su oferta ante las y los votantes.
Desde que iniciaron las precampañas y hasta el día en que tendremos jornada de votación, en esas entidades se habrán transmitido 6.6 millones de spots electorales: En Puebla 827,000 spots; en Baja California 1.5 millones; en Durango, 734,000; Aguascalientes 448,000, y en Quintana Roo 967,000.
El despliegue logístico para garantizar urnas cerca de cada domicilio implica la instalación de poco más de 23,000 casillas a instalarse en las entidades con proceso electoral de este año, a las cuáles están llamados 13.5 millones de mexicanos y mexicanas con derecho a voto.
No existen contextos idénticos en cada una de las entidades que celebran comicios este domingo, tampoco legislaciones locales en materia electoral exactamente iguales entre sí, y los retos de organización, en general, siempre requieren desahogar actividades complejas y permanentes en muchos casos. Para eso existen autoridades electorales locales y el INE. No podría sostenerse el modelo de democracia vigente si de pronto se decretara que cada tres años deben suspenderse los trabajos técnicos en materia electoral para reanudarlos hasta que nuevos comicios estén a punto de celebrarse.
Ése es un tema que debe llevarnos a una reflexión profunda y a la presentación de diagnósticos técnicos que presenten opciones para la toma de las mejores decisiones de los legisladores en la próxima reforma electoral.
Por el momento, esperemos a que los electores decidan en libertad y en paz quiénes ocuparán las responsabilidades que serán sometidas a la evaluación del voto el 2 de junio.
*Consejero del INE.
Twitter: @MarcoBanos
Tomado de El Economista.