La economía de México seguirá desacelerándose este año y podría forzar al Gobierno a aplicar recortes adicionales de gastos, en buena parte debido a políticas económicas “impredecibles” que socavan la confianza de los inversores, dijo el lunes la agencia de calificación de crédito Moody’s.
En un reporte, la firma alertó sobre los riesgos a mediano plazo para el panorama fiscal de México, la segunda mayor economía de América Latina, ante un enfriamiento de la actividad y cambios en la política energética que involucran a la estatal petrolera PEMEX.
Información relacionada: Llaman expertos a la revisión de los salarios mínimos profesionales “Seguimos anticipando un año de desafíos para la economía de México y estimamos que el crecimiento se ralentizará a 1,2% en 2019, desde 2% en 2018”, dijo Alejandro Olivo, director adjunto de Moody’s, en el informe.
“Como consecuencia, los ingresos públicos podrían ser menores que lo estimado por el Gobierno, lo que requeriría reducciones en gastos para mantener la rectitud fiscal prometida por el presidente Andrés Manuel López Obrador“, sostuvo.
Moody’s prevé que PEMEX necesitará apoyo financiero adicional del Gobierno mexicano a fin de costear sus planes de inversión de capital y afrontar un esperado flujo negativo de caja.
En mayo, el Banco de México (Banxico) redujo por cuarta vez consecutiva su proyección de crecimiento económico para 2019 hasta un rango de 0.8%-1.8%, ante un complicado inicio de año por el débil desempeño de la economía global y local.