Los proyectos de infraestructura más importantes planteados por el gobierno federal se concentran, principalmente, en el sureste del país; éstos presentan diversas fases de desarrollo.
El Corredor Transístmico plantea modernizar los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz, y Salina Cruz, Oaxaca, así como mejorar la intercomunicación por carretera y ferrocarril con inversión exclusivamente mexicana, aseveró este fin de semana el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ha propuesto que se convierta en una alternativa para ir del Golfo de México al océano Pacifico sin ir hasta el Canal de Panamá.
El mismo Presidente anunció que la licitación para desarrollar y supervisar la construcción de la refinería en Dos Bocas, Tabasco, se declaró desierta y el gobierno federal se encargaría de echar a andar el proyecto, el cual quedó a cargo de la Secretaría de Energía, Pemex y el Instituto Mexicano del Petróleo.
Para garantizar la transparencia en las licitaciones realizadas por el gobierno federal se determinó que todos los concursos los desarrollaría la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda.
Las licitaciones más importantes se realizarán con la vigilancia de la ONU. El proyecto está a la espera del estudio de Impacto Ambiental.
Al inicio del gobierno se anunció formalmente que el proyecto del Aeropuerto de Santa Lucía será construido por el Ejército.
La cancelación de la terminal aérea en Texcoco requirió que el gobierno de México recomprara los bonos de inversionistas, operación que se cerró a finales de diciembre.
Actualmente el proyecto está en proceso de generación del estudio de impacto ambiental, de gestión de decenas de amparos en contra y de otros amparos para seguir los trabajos en Texcoco.
Para el proyecto del Tren Maya están en proceso la generación de estudios de impacto ambiental y de gestión de las zonas arqueológicas cercanas a su trazo.
Los gobernadores del sureste apoyan abiertamente el proyecto; incluso hay empresas ferroviarias que exploran la inversión en él. Pero persisten protestas de grupos ambientalistas, comunidades indígenas y del EZLN.
El Tren Interurbano que conectará el Aeropuerto Internacional de Monterrey con el municipio de García, atravesando cinco municipios más, conectará dos líneas del Metro y con una del Metrobús.
El proyecto estuvo congelado cerca de 20 años. Se usará una vía abandonada y servirá también de libramiento férreo para evitar que los trenes de carga pasen por la zona metropolitana de Monterrey.
