Los pescadores de Vega de Alatorre aseguran que las obras de construcción de la autopista Poza Rica-Cardel, que pasará por su municipio, están generando serios problemas al medio ambiente.
Valeria Martínez Lagunes, presidenta de la sociedad cooperativa Santa Ana, asegura que los daños son irreversibles y el ecocidio continúa y dejará en total indefensión a más de cien familias de pescadores.
“Lo que queremos evitar en la laguna de San Agustín es que no la sequen como nos secaron esta laguna, aquí teníamos mojarra tilapia, de aquí nos estábamos manteniendo también, ya nos secaron esta laguna queremos evitar que nos sequen la otra”.
Las afectaciones al medio ambiente son reales, por ello pescadores y sus familias aseguran que están acabando con manglares y ahora se está secando la laguna San Agustín, en donde decenas de pescadores obtienen su producción de robalo, mojarra, jaiba, ostión y caracol, entre otras especies que se están extinguiendo.
“Yo soy hija de un pescador y al igual que muchos de ellos, me gusta también asistir a pescar, sé lo que es ganarse un peso de sacar un ciento de ostión de sacar millares de ostión, de andar agarrando jaiba, camarón, toda la producción de una laguna y pues sí, las familias que vivimos de eso, sí sentimos mucho la afectación que está viviendo esta gente.”
Los pescadores de diferentes sociedades pesqueras piden al gobierno federal que intervenga, que detenga este daño irreversible al medio ambiente, que abra una investigación y que obligue a los constructores de la autopista a frenar el daño ecológico que están generando al tapar con sus obras fluidez del agua, ya que de no actuar a tiempo la laguna San Agustín también está condenada a desaparecer.
