El Instituto de la Economía Mundial de Kiel (IfW, por sus siglas en alemán) ha alertado de que Alemania entrará en recesión durante 2019 y que su economía se seguirá deteriorando hasta 2021, cuando registrará su primer déficit desde 2011.
“La economía alemana se está enfrentando a uno de sus años más débiles desde la crisis financiera“, ha asegurado este miércoles el organismo germano.
Los economistas del instituto han pronosticado que el producto interior bruto (PIB) de Alemania crecerá un 0.4 por ciento durante 2019. Sin embargo, el país entrará en recesión técnica, como se conoce a encadenar dos trimestres de contracción económica. Así, mientras que en el segundo trimestre del 2019 el PIB se contrajo un 0.1 por ciento, el IfW ha adelantado que la contracción se agravará durante el tercer trimestre hasta el 0.3 por ciento.
Pasado 2019, el organismo estima que la economía repunte, creciendo un 1 por ciento en 2020 y hasta un 1.4 en 2021, pese a que el crecimiento podría elevarse si
desaparecen vulnerabilidades como la guerra comercial entre Estados Unidos y China y el Brexit.
“El verdadero problema con las disputas comerciales de Donald Trump no son los aranceles, sino la gran incertidumbre sobre lo que está por venir, porque la incertidumbre es veneno para las decisiones de inversión”, ha asegurado el presidente del IfW, Gabriel Felbermayr.
En lo que respecta al mercado de trabajo, el IfW ha asegurado que las consecuencias de la ralentización económica comenzarán a notarse en el mundo laboral. De esta forma, la tasa de paro pasará del 5 por ciento actual al 5.2 en 2020 y el 5.3 en 2021. Además, por primera vez desde la crisis, el número de empleados descenderá, en 2020, por debajo de los 45.1 millones.
Los economistas del instituto económico estiman que Alemania cerrará 2019 con un superávit de 43 mil millones de euros (1.3 por ciento del PIB), que caerán hasta 14 mil millones en 2020 (0.4 por ciento del PIB) y en 2021, se registrará un décit de 7 mil millones de euros, equivalente al 0.2 por ciento del PIB.