No hay vuelta atrás en la lucha contra el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), causante del SIDA. Las infecciones por este virus continúan siendo una de las grandes pandemias que afectan a la humanidad, con más de 37 millones de personas que viven con la infección, unos 32 millones de personas fallecidas desde su aparición en 1981, y 770 mil muertes en 2018 por lo que es fundamental avanzar en la búsqueda de una vacuna preventiva.
Algo que puede estar cerca de lograrse fruto de una colaboración internacional, en la que participan investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que están desarrollando una vacuna contra el VIH a partir de la combinación de tres inmunógenos. Actualmente el nuevo prototipo de futura vacuna ya ha pasado la fase del ensayo de seguridad y respuesta inmunológica con 96 pacientes y está listo para pasar a las fases II y III de eficacia clínica.
VACUNA VIH: LOS PRIMEROS RESULTADOS SON ALENTADORES
Los resultados del trabajo, publicado en la revista The Lancet HIV, muestra la evolución de los vacunados, midiendo parámetros que correlacionan con seguridad, respuesta inmunológica y protección.
Este estudio ha demostrado que los procesos de vacunación son seguros y producen respuestas inmunes específicas de forma rápida frente al VIH, con altos niveles de anticuerpos neutralizantes de VIH, de amplio espectro de acción contra distintos subtipos del VIH.
“La combinación de inmunógenos acelera la activación de la respuesta inmune específica en los individuos vacunados, lo que es importante para conseguir protección. Estos procesos de inmunización son muy relevantes para futuros ensayos de eficacia contra el VIH en países con un alto índice de infección”, explica Mariano Esteban, del Centro Nacional de Biotecnología (CNB), y responsable junto a su equipo de uno de los tres inmunógenos utilizados, el vector NYVAC.