Un “mega incendio” de una extensión de 60 kilómetros arde sin control en el área norte de Sydney, disparando una nueva alerta en toda la ciudad por la densa capa de humo y los severos daños, entre ellos la destrucción por el fuego de más de 680 casas.
Las altas temperaturas de los últimos días avivaron las llamas desde el área de Colo en Hawkesbury hasta cerca de Singleton, en el norte de Sydney, capital del estado de Nueva Gales del Sur, costa este de Australia, donde se registran más de un centenar de focos de fuego.
El Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur (RFS, por sus siglas en inglés) informó que al menos unos ocho incendios forestales se combinaron y crearon un “mega incendio” de 60 kilómetros al norte de Sydney, en medio de condiciones climáticas deterioradas. “Simplemente hay fuego todo ese camino”.
La Oficina australiana de Meteorología, citada por la Australian Broadcasting Corporation (ABC), señaló a su vez que “algunos incendios eran demasiado grandes como para apagarlos” y el humo se había extendido al resto de la ciudad y permanecería por varias horas, por lo que los residentes debían tomar medidas de precaución.
Los bomberos indicaron que más de 680 hogares han sido destruidos por el fuego en varias zonas del estado durante la temporada de incendios.
Al menos unos dos mil bomberos intentan apagar las llamas desde hace varios días en el este de Australia, donde las autoridades se vieron forzadas a cancelar eventos programados para el fin de semana debido a la espesa capa de humo que prevalece en el ambiente.
Esta temporada de incendios en Australia está resultando de las más devastadoras de los últimos años en parte por las altas temperaturas que aún estar por llegar con el verano austral (de diciembre a marzo).
gac
