La Agencia Internacional de Energía (AIE) estimó que durante el año habrá una caída en la demanda de 9 millones de barriles diarios (mbd) y el crecimiento acelerado de los inventarios derivado de un decremento en la demanda por las restricciones a causa del COVID-19, impactaron los precios de las principales mezclas de petróleo que cerraron la sesión con resultados mixtos.
El precio del barril de crudo mexicano cayó 6.99 por ciento frente a los 15.30 dólares que anotó la jornada de ayer, su precio más bajo en dos semanas.
De acuerdo con datos de Petróleos Mexicanos (Pemex), este miércoles el barril se vendió en 14.23 dólares, es decir un decremento de 1.07 centavos con respecto al cierre anterior, con lo que suma dos sesiones con pérdidas.
La sesión del 14 de abril el barril terminó con pérdidas del 10.84 por ciento, al cotizar en 15.30 dólares por barril.
El precio del petróleo de Texas (WTI) cerró con un retroceso del 1.19 por ciento, al ubicarse en 19.87 dólares el barril, su nivel más bajo en 18 años como consecuencia de la histórica caída de la demanda provocada por la crisis del COVID-19.
Al final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en mayo perdieron 24 centavos con respecto a la sesión previa.
El precio del barril de Texas al cierre de las operaciones de este miércoles se situó en un nivel no visto desde febrero de 2002, por debajo de la barrera de los 20 dólares, cuando a comienzos de este año superaba los 60 dólares.
En tanto que, el precio del barril de Brent bajó este miércoles un 6.45 por ciento en el mercado de futuros de Londres, ante la incertidumbre imperante por la pandemia del coronavirus y a pesar del acuerdo de la OPEP+ de reducir su producción.
El petróleo del mar del Norte, de referencia en Europa, terminó la sesión en 27.69 dólares, frente a los 29.60 dólares alcanzados al cierre de la negociación del martes.
“La caída de hoy del petróleo se dio por la expectativa de que el exceso de oferta seguirá”, explicó la analista Gabriela Siller de Banco Base.
La Agencia Internacional de Energía (AIE) estimó que durante el año habrá una caída en la demanda de 9 millones de barriles diarios (mbd), borrando el crecimiento en el consumo de petróleo de los últimos 10 años.
En tanto que la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés), reportó que los inventarios de crudo en aumentaron en un histórico de 19.25 millones de barriles, a un total de 503.6 millones de barriles, no visto desde junio del 2017.
Los integrantes de la OPEP+ (miembros de la OPEP y sus socios) pactaron un recorte de la producción en 9,7 millones de barriles diarios durante mayo y junio, con el objetivo de nivelar la fuerte caída de la demanda originada por el brote.
México se comprometió a reducir en 100 mil barriles diarios su producción como parte del acuerdo, sin embargo, este pacto no ha logrado estabilizar los precios internacionales del crudo.