Aunque el corredor turístico de Costa Esmeralda se han mantenido en semáforo verde en lo que va de pandemia por Coronavirus, todos los servicios hoteleros, restauranteros, incluso el acceso a las playas, se mantuvieron cerradas desde marzo pasado a la fecha, por lo que ahora se preparan para reinar actividades bajo protocolos estrictos de sanidad.
Gloria Santiago, presidenta de la asociación de prestadores de servicios de esta zona, detalló que a partir del 1 de junio se tomó la decisión de abrir los establecimientos, pero solo con ocupaciones entre el 25 y 30% de su capacidad dependiendo de las instalaciones y bajo la supervisión de las autoridades municipales de Tecolutla y la Jurisdicción Sanitaria con sede en Martínez de la Torre.
“La idea es iniciar a usar las instalaciones entre un 25 y 30 por ciento pero aplicación los protocolos que nos dio la secretaría de turismo y sacando algunos de la OMS, también el director de la jurisdicción sanitaria va a incrementar los cursos en la Costa Esmeralda para abrir de manera eficiente y no tener contagios”, dijo.
Lamentó que la pandemia haya afectado la temporada de Semana Santa que es la de mayor afluencia en esta zona y previó que las vacaciones de verano tampoco serán prometedoras debido a que todavía habrá restricciones en los establecimientos, pues la meta es mantener el récord de cero contagios.
“El verano va a ser como la prueba para ver de qué manera trabajamos y esto va a ser de manera paulatino, muy poco a poco se va a ir incrementando el procesare en hoteles, palapas, pero si os guardamos tanto tiempo seria incongruente que dejáramos llenar a su máximo, así que julio y agosto no tendremos ocupaciones del 100% tampoco”, comentó.
El sector restaurantero, hotelero y de campamentos que predomina en esta zona también aplicarán protocolos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para tener un mayor control y evitar contagios.
Foto: El Demócrata