«Mis maestros me enseñaron a leer. De mis amigos aprendí a escuchar y ser escuchado.. Mis maestros me enseñaron a sumar, multiplicar, restar y dividir con números. De mis amigos aprendí a sumar diversión, multiplicar risas, a restar problemas y a dividir penas..Mis maestros me enseñaron a cumplir con la tarea. De mis amigos aprendí que la tarea más importante es dar y recibir.. Mis maestros me enseñaron a vivir la historia. De mis amigos aprendí a vivir el presente.. Mis maestros me enseñaron a valorar el esfuerzo. De mis amigos aprendí a valorar la presencia.. Mis maestros me enseñaron a prepararme para la vida. De mis amigos aprendí la vida misma». Lo escribe Enoch Alvarado en «La Sabiduría del Humor». Imagen de la película  «Amistad sin fronteras».