Ayer en el evento en que Morena y aliados declararon precandidata única a Claudia Sheinbaum,  fue muy notoria la ausencia de un de los cuatro aspirantes de la contienda interna presidencial de este partido. Nos referimos a Marcelo Ebrard que a diferencia de Monreal y Adán Augusto no asistió, y sólo envió un diputado afín como representante. Cómo dice Salvador García Soto en «El Universal» parece que no le simpatiza mucho ella,  y no puede aún digerir  la derrota. Foto de archivo en la SRE, donde haría falta si vuelve a ganar Trump, porque ya le sabe el modo.