«Una vez que recibí mi título se me ocurrió la equivocada idea de dejar a Los Joao. Me ofrecieron un trabajo en Aguascalientes por lo que dejé a mis adorados compañeros. Una tarde que estaba en Aguascalientes viendo a los Hermanos Castro en la televisión, se me salieron las lágrimas de tristeza- pues Los Joao tocábamos muchas de sus canciones-, en ese momento entró mi esposa a la recámara y me dijo -¿De verdad extrañas tanto la música? -Sí, para mí es parte de mi vida. -¡Pues vámonos!, dijo ella. Nos regresamos a Xalapa y me reincorporé al Grupo». Lo escribió el querido amigo, ya finado, Armando Arcos Suárez en su libro «Los Joao. Armando Recuerdos». Foto del libro.