Un grupo de adultos mayores, integrantes de la Asociación Gustavo Salgado, marcharon y acudieron al Palacio Municipal de Cuernavaca, para instalarse en plantón frente a la Presidencia Municipal, luego de que el alcalde Cuauhtémoc Blanco Bravo se ha negado a recibirlos y atender sus demandas.
Al momento de llegar a la oficina del alcalde, el secretario del Ayuntamiento y alcalde de facto de Cuernavaca, Roberto Yáñez Moreno, trató de dialogar con los manifestantes, pero lo rechazaron luego de reprocharle que llevan varios meses en dialogo con él, sin ninguna solución.
La principal demanda de los ancianos es que se revierta el incremento de 300 por ciento en el impuesto predial, como aparece en los recibos que este año que llegaron a sus hogares y que los obliga a cubrir de tres veces más de lo que regularmente pagaban, pese a tener viviendas precarias en colonias populares de la ciudad.
Cabe señalar que el Congreso de Morelos emitió una Ley de Ingresos y Egresos que, según los integrantes de la asociación, fue mal interpretada por el alcalde Cuauhtémoc Blanco, quien elevó los impuestos para solventar el déficit financiero del Ayuntamiento, provocado por la corrupción, y no ha respetado el descuento establecido para los adultos mayores en dicha ley.
El plantón instalado en las oficinas del Ayuntamiento tiene como propósito exigir que sea el Cabildo quien reglamente el cobro de los impuestos como lo establece la ley.
Los manifestantes -en su mayoría vecinos de las colonias populares de Cuernavaca- llegaron con estufa, mesas y sillas, dispuestos a quedarse en plantón frente a la alcaldía y esperar hasta que sea el propio alcalde de Cuernavaca quien se presente a resolver su demanda.
La decisión de instalarse en plantón fue tomada la tarde de ayer por los adultos mayores que acudieron a la asamblea de esta organización, luego de que la semana pasada les respondieron que no habría descuento para ningún anciano y que todos deberían pagar lo que la Tesorería municipal les ha demandado.
Antes, el alcalde Cuauhtémoc Blanco había acusado al dirigente de esta organización, Gabriel Rivas Ríos, de hacer marchas y protestas por contrato, además de pedir dinero a los integrantes de esta asociación, lo que causó el descontento de ancianos.
Por su parte Gabriel Rivas expresó “nosotros creemos que la actitud actual que está asumiendo Cuauhtémoc Blanco, Roberto Yáñez y toda la administración municipal, es una administración cerrada, una administración que se está basando en berrinches, en bravuconadas contra la población”.
Él no conoce a los cuernavaquenses y no conoce sus problemas, y más le convendría mejor informarse de que es lo que ocurre en Cuernavaca, porque estamos inconformes los ciudadanos y porque no estamos dispuestos a permitir incrementos a los impuestos”.
