Bob Dylan, el cantautor que la semana pasada ganó el premio Nobel de Literatura, continúa con sus presentaciones por el suroeste de Estados Unidos, sin haber hecho ninguna referencia pública al galardón otorgado por la Academia Sueca.
Desde que le fue concedido el Nobel el pasado 13 de octubre, Dylan ha permanecido en silencio en lo referente a dicha distinción, sin hacer comentarios durante sus presentaciones y sin conceder entrevistas a los medios de comunicación.
Dylan tampoco ha contactado a la Academia Sueca para confirmar si asistirá el próximo 10 de diciembre a la ceremonia de entrega del premio, que le fue concedido “por haber creado nuevas expresiones poéticas en el marco de la gran tradición musical americana”.
El músico de 75 años de edad realiza una intensa gira por el suroeste de Estados Unidos y desde que se anunció el premio se ha presentado en Las Vegas, Nevada; Indio, California y Phoenix, Arizona. Este martes tiene programado estar en Albuquerque, Nuevo México, y el miércoles en El Paso, Texas.
El director administrativo de la Academia Sueca, Odd Zschiedrich, dijo este martes a la cadena de televisión CNN que, tras múltiples intentos de contactar a Dylan, esa institución ha desistido de continuar haciéndolo.
“Hemos dejado de intentarlo, hemos dicho lo necesario a su mánager y amigo, él sabe que nosotros estamos ansiosos de tener confirmación por parte de él, pero no hemos oído nada a cambio”, indicó Zschiedrich.
El funcionario sueco dijo que han estado en contacto con los administradores de Bob Dylan, pero no se ha recibido respuesta del mismo compositor y cantante.
“Tendremos la ceremonia como es habitual, tendrá el premio, incluso si él no está allí”, aseguró Zschiedrich.
Está programado que el rey Carl Gustav de Suecia entregue a Dylan su premio Nobel en una ceremonia de entrega de premios en Estocolmo, Suecia, el próximo 10 de diciembre.
Dylan tiene un historial de esquivar ceremonias de premiación. En el 2007, cuando España le concedió el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, el trovador no acudió a Oviedo para recoger el galardón porque se encontraba en Omaha para ofrecer un concierto.
El músico tampoco acudió en el 2010 a la ceremonia en la Casa Blanca, en la que recibiría la Medalla Nacional de Las Artes.
