El gobierno de la Ciudad de México ya hizo su trabajo al lograr que se concretara la reforma política, con lo que se da posibilidad a que esta entidad tenga su propia Constitución, ahora corresponde al Constituyente elaborar el documento fundacional, afirmó el mandatario capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa.
“No es necesaria más injerencia y más participación por parte del gobierno de la ciudad, ahora es el trabajo y la voluntad política que se muestre en el Constituyente”, puntualizó, al inaugurar el seminario internacional La profesionalización de la función pública para garantizar el derecho a la buena administración: reflexiones hacia la Constitución de la Ciudad de México, en la Escuela de Administración Pública.
Por lo que, el titular del Ejecutivo local pidió no asustarse por el número de iniciativas y modificaciones al texto que él presentó el pasado 15 de septiembre. “Por el contrario, me parece que son muy válidos y debatibles, además es lo que genera el cambio”.
Mancera Espinosa se congratuló de que se esté generando un gran debate en torno a la elaboración de la Carta Magna de esta ciudad. “Imagínense que el documento inicial que se envío no generara ningún debate, que simple y sencillamente pasara liso y llano sin la posibilidad de confrontar ideas; ésa no sería la tarea que tiene encomendada una ciudad como esta”, acotó.
Señaló que se debe construir una democracia que ofrezca confianza, pero, aclaró, esta no debe ser paternalista, sino que realmente debe haber más cercanía con los ciudadanos, con el progreso y con el desarrollo.
Agregó que hay la inquietud de que no se cuente con el documento en el plazo marcado; sin embargo, eso lo determinará el Constituyente. “Lo más importante para la ciudad es tener ese documento fundacional, que nos dará una identidad y rumbo claro hacía donde vamos”, concluyó.