El presidente de la República Eslovaca, Andrej Kiska, expresó su preocupación por el auge en el mundo del nacionalismo, populismo y extremismo, que a su juicio obedece a la falta de prosperidad en las sociedades, la cual puede ser enfrentada en unidad por todos los países.
Durante su discurso ante el Senado de la Republica, en el marco de la sesión solemne donde fue recibido, dijo que ese panorama se da frente al hecho de que las sociedades han perdido la tolerancia y la comprensión que se sustituye por la confrontación.
“Es consecuencia de la falta de defensa de los valores básicos en que se han construido nuestras sociedades democráticas”, alertó ante senadores y diputados mexicanos.
“También es consecuencia de que no siempre conseguimos dar a los ciudadanos lo que desean, que las sociedades prosperen, que funcione bien, con seguridad, con educación para que la gente viva de forma digna. Esta es la responsabilidad que cae en los hombros de los políticos”, enfatizó el mandatario eslovaco.
Ante ello, consideró que el mundo de hoy debe hacer frente a muchos retos y es importante darse cuenta de que ningún ningún país puede afrontarlos solo, ya sea el cambio climático, el desarrollo económico.
Es deber de todos los países que se basan en la democracia y libertad el unirse y no separarse, agregó.
Tras lamentar lo ocurrido por los sismos en México, Andrej Kiska refirió que México y la República Eslovaca comparten valores democráticos y el interés de una mayor cooperación, para lograr nuevas amistades, asociaciones.
Recordó que su nación es el mayor productor de automóviles per cápita en el mundo y México es un amigo y un socio comercial, el más importante en América Latina.
“No aprovechamos todo el potencial que tenemos”, por lo que se busca intensificar las relaciones no sólo comerciales, sino también en ciencia, investigación y cultura, añadió.
En su oportunidad, el presidente de la Mesa Directiva del Senado, Ernesto Cordero Arroyo, destacó el crecimiento económico de la República Eslovaca en las últimas tres décadas, con una economía sólida, estable, logros sobresalientes en desarrollo humano y seguridad social.
“Su país ha conseguido una mezcla entre riqueza cultural milenaria con progreso, con infraestructura de calidad”, subrayó el senador mexicano, quien expuso que ambas naciones son grandes productores en la industria automotriz mundial y también comparten valores democráticos.