El presidente Enrique Peña Nieto sostuvo una reunión de trabajo con integrantes del Consejo Mexicano de Negocios (CMN), en la que hizo un recuento de los avances y temas pendientes del año que está por concluir.
El mandatario agradeció al CMN por su acompañamiento en los últimos 12 meses, durante los cuales el país enfrentó desafíos como la incertidumbre generada por factores externos y el impacto de desastres naturales.
Expresó a los empresarios su reconocimiento por apoyar a la población afectada por los sismos de septiembre y enfatizó que los donativos del sector se ejercen a partir de criterios claros, como la coordinación con el gobierno, la libertad para elegir el destino de ayuda y la total transparencia.
Dijo que 2017 fue un “año de retos” que se enfrentaron bajo tres líneas de acción, como privilegiar la estabilidad “macro” con finanzas públicas sanas; complementar las políticas públicas de carácter estructural con medidas coyunturales como el programa de repatriación de capitales; y avanzar en la implementación de las reformas estructurales.
El titular del Ejecutivo federal hizo referencia al informe recibido durante su reciente visita a la sede de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), que reconoce a México como el mayor reformador de los últimos años entre los países de esa organización.
En el reporte estima que las reformas añadirán dos puntos porcentuales al crecimiento del PIB, una vez transcurridos cinco años de su implementación, también destaca retos como la desigualdad y advierte que para hacerles frente el programa de reformas debe continuar.
El Consejo Mexicano de Negocios es una organización de empresarios, miembro del Consejo Coordinador Empresarial, que agrupa a alrededor de 50 directivos de las principales empresas en México, que en la actual administración ha anunciado inversiones por más de 150 mil millones de dólares.