En abril de este año, el Instituto Politécnico Nacional (IPN), a través del Centro de Desarrollo de Desarrollo Aeroespacial (CDA), realizará un segundo vuelo a la estratósfera para estudiar los efectos ocasionados por las explosiones volcánicas y sísmicas del país a bordo de una plataforma suborbital multimisión que además permitirá a mediano y largo plazo, implementar y validar experimentos científicos basados en la determinación de variables geomagnéticas, así como realizar ensayos con muestras biológicas, detalló Mario Alberto Mendoza Bárcenas, investigador del Centro.
La misión validará el nuevo Sistema de Adquisición de Datos Meteorológicos (SADM), versión 1.1 (SADM-1.1) y colocará un sensor para estudiar los efectos derivados de las explosiones volcánicas; el viaje es impulsado por el IPN, en colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad Complutense de Madrid y Proxima Space.
El investigador del IPN señaló que en la primera etapa se pondrá a prueba la adquisición y registro de variables meteorológicas que coadyuven al reforzamiento sobre el estudio sobre precursores sísmicos en la ionósfera.
El especialista indicó que el CDA dirigirá el proyecto, el cual se pretende realizar en las instalaciones del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial, dependiente del Ministerio de Defensa del Gobierno de España.
Agregó que eligieron el nombre de Tepeu (de origen maya) porque era un Dios del Cielo y uno de los hacedores que participó en los tres intentos de crear la humanidad, se consideraban como creadores, los fabricantes y los antepasados.
Mendoza Bárcenas sostuvo también se diseñará una plataforma satelital tipo Cubesat, tamaño U1 que estará integrada por tres subsistemas básicos: computadora abordo, un módulo de alimentación de energía eléctrica y comunicaciones, así como un dispositivo mínimo de carga útil (incluirá sensores para la adquisición de variables, tales como temperatura y campo magnético).
Afirmó que se priorizará la formación profesional para poder integrar la misión espacial que abarcará el segmento espacio (que es el satélite), la tecnología asociada a ella y lo referente a la estación terrena compartida con la UNAM.
En el caso del proyecto de vulcanología, indicó que realizarán con Miguel Ángel Santoyo, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM, el análisis de los efectos que provocan las explosiones volcánicas (principalmente del Popocatépetl) en las capas altas de la atmósfera.
Estos estudios se llevarán a cabo durante el segundo vuelo al espacio, en donde tomarán fotografías de las fumarolas para verificar si la temperatura correlacionada a la explosión del volcán, produce cambios geomagnéticos, en la temperatura (por citar algunas) en la estratósfera.