El Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NACM) se realiza no sólo con la participación de la iniciativa privada sino también con los recursos que entregan los propios usuarios de la actual terminal aérea cuando pagan sus derechos de uso, aunque también el gobierno federal debe invertir en infraestructura adicional, estableció el presidente Enrique Peña Nieto, y aseguró que esa obra “será un icono de la infraestructura nacional “.
Dijo que el aeropuerto es “de todos los mexicanos” porque el que está en operación hace mucho rebasó su capacidad pues anualmente mueve a casi 40 millones de pasajeros, además de muchas de las mercancías que abastecen al centro del país.
Indicó que cuando el NACM trabaje a su máxima capacidad detonará la creación de 450 mil empleos e insistió: se construye con la participación del capital privado.
Peña Nieto realiza gira de trabajo por Veracruz para poner inaugurar el tramo Nautla-Gutiérrez Zamora de la autopista Cardel-Poza Rica y supervisar el avance de los trabajos en el Nuevo Puerto de Veracruz.
En su mensaje resaltó una vez más la participación empresarial tanto en el desarrollo de la infraestructura carretera, de salud y educación, como en la inversión productiva.
Eso es así, resaltó, porque la inversión del gobierno nunca será suficiente, y de ahí la invitación invariable y permanente a la iniciativa privada para que arriesgue su capital en los distintos proyectos.
Pero ese involucramiento del capital de los particulares “sólo se posibilitará por la confianza “.
Entonces, subrayó Peña Nieto, si no hay confianza, Estado de Derecho y respeto a los inversionistas, eso no ocurrirá.
Y son esas, destacó entonces, las condiciones que ha sembrado este gobierno.
Había dicho además que a México le va bien, crece y tiene mayores condiciones de desarrollo en la medida en que cada una de las partes que lo conforman tenga éxito.
Se dijo satisfecho de haber impulsado en estos casi seis años grandes proyectos de infraestructura, y que a estas alturas puede dar cuenta y hacer un balance objetivo “de cuánto hemos avanzado”.
Esta, insistió el presidente Peña, es la administración del empleo y de la inversión y donde incluso -sobre todo en la segunda- se han superado incluso las metas del Plan Nacional de Desarrollo.
Aprovechó también para defender la Reforma Educativa y aseguró que la enseñanza de calidad poco a poco se está sintiendo en las escuelas porque era necesario impulsarla, pues “no se puede condenar a las generaciones actuales a la frustración y al fracaso”.