El cuerpo humano es una máquina fascinante, capaz de auto-regenerarse -hasta cierto punto- y sanar posibles heridas internas y externas. Aunque en la época actual, este proceso de curación va asociado a la Farmacología. Tomamos pastillas, remedios en polvo, infusiones, nos damos con cremas, ungüentos, etc. Pero, ¿y si hubiera una manera de sanar una herida y paliar el dolor sin usar ningún tipo de medicina? La hay, y es mediante la tecnología, mediante la realidad virtual exactamente.
CURAR SIN MEDICAMENTOS
Hace curiosamente un año investigadores británicos estuvieron probando si el uso de la Realidad Virtual se podía aplicar a la hora de relajar un paciente y calmar el dolor y la ansiedad en plena consulta con el dentista, y para ello contactaron con 79 sujetos que debían hacerse empastes y endodoncias. Una parte se sentó en la silla del dentista con unas gafas VR viendo un paisaje costero, otra parte hizo lo propio pero con un escenario urbano, y el resto se sentaron sin llevar gafas VR ni nada. Los del paisaje costero fueron los que menos sufrieron, demostrando que distraer al cerebro es clave para aliviar el dolor.
Hoy, un año después vemos que unos estudiantes graduados del Hospital Saint Joseph en Francia han diseñado un programa inmersivo virtual que está siendo usado en Urgencias para ayudar a los pacientes a relajarse e incrementar la tolerancia al dolor sin necesidad analgésicos. No se trata de curar mágicamente usando la VR, sino de distraer al cerebro para que el dolor no sea tan acuciante. El programa que estos estudiantes manejan sumergen al usuario (que debe llevar unas gafas VR puestas) en un viaje chill-out por paisajes como colinas nevadas y jardines zen japoneses.
HOSPITALES CON VR EN 10 AÑOS
Si el paciente debe pasar por un tratamiento delicado, como recolocar un hombro dislocado, el llevar unas gafas VR y visionar contenido relajante le servirá para tener la mente en otro lugar. Como dicen sus autores, “nos permite ofrecer a los pacientes una técnica para distraer su atención y reducir su dolor y ansiedad a la hora de ser tratados en una sala de emergencias. Creo que en 10 años la VR ya no será más una duda, y será usada de manera rutinaria en los hospitales“.