Han pasado 75 años desde que el mundo conoció, por medio de un libro, a un pequeño niño de cabellera dorada que vivía en un asteroide y estaba enamorado de una rosa.
Si con esto ya averiguaste de que novela estamos hablando, seguro al igual que nosotros, eres fan de Antoine de Saint-Exupéry y te sabes de memoria la historia de ‘El Principito’.
Seguro recuerdas a los baobabs, «árboles grandes como iglesias’ que si se dejan crecer podían «hacer estallar» su planeta.
Bueno, aunque es una historia de ficción, los baobabs si existen pero lamentablemente, al igual que muchas otras cosas, están desapareciendo.
Según la revista Nature se reporta que 9 de los 13 árboles más viejos y 5 de los 6 más grandes han muerto o al menos sus tallos han colapsado y han perecido en los últimos 12 años.
Estos resultados se han obtenido gracias a un estudio realizado entre 2005 y 2017 por un grupo de científicos de Sudáfrica, Rumanía y EE.UU. En la investigación se documentaron 60 de los mayores árboles del continente y los que potencialmente vivirán más tiempo. Al haber recolectado muestras de madera de las cavidades internas y externas de los troncos y de incisiones profundas en los tallos, los expertos se dieron cuenta de que la mayoría murieron durante el periodo de pruebas.
NO HAY SEÑALES DE EPIDEMIA NI ENFERMEDAD
Los investigadores se quedan perplejos ante esa desaparición ya que no encuentran señales de una epidemia o enfermedad. No obstante, suponen que los cambios climáticos registrados en el sur de África podrían influir y a la vez destacan que se necesita más investigación para confirmar esta hipótesis.
El baobab africano (Adansonia digitata) es la planta floreciente más longeva que se encuentra en las regiones tropicales del continente: pueden vivir hasta 2 mil años. Además, es el árbol más grande de África y su altura alcanza los 25 metros. Se destacan por su particular apariencia de árbol ‘al revés’: las ramas se asemejan más bien a las raíces.