Con una afluencia de al menos 30 mil visitantes, este viernes se realizó la suelta de toros en Tlacotalpan.
Seis toros cebúes fueron liberados para ser toreados por los asistentes a la fiesta de la Virgen de La Candelaria.
Algunas personas se llevaron golpeas al ser embestidos por los semovientes, o sufrieron de crisis nerviosa al verse cerca de los cuernos de los animales.
El saldo de la fiesta es blanco, señaló el alcalde de Christian Romero Pérez.
Los únicos “heridos” fueron los que se pasaron con los “toritos”, caguamas y micheladas, pues varios fueron a parar al hospital.
Voluntarios y personal de diversas dependencias cuidaron que los animales no fueran maltratados.
El tercer toro que fue soltado intentó en varias ocasiones regresar al carril por donde había salido, tras ser cruzado por el río Papaloapan en una panga.
En esos intentos embistió a un hombre y una mujer que estaban sobre las vallas metálicas.
Salvo el golpe en el trasero con la cabeza del toro y el susto de su vida, el asunto no pasó a mayores.
Las fiestas están siendo cuidadas por cielo, tierra y agua.
700 elementos de seguridad pública estatal y personal médico cuida a los asistentes a la Candelaria refirió el edil.
También participan 160 elementos de la Fuerza Civil; 6 perros, 14 patrullas, 20 elementos a caballo,4 embarcaciones y 2 helicópteros así como 90 agentes de tránsito estatal.
Personal médico y paramédico y con cuatro ambulancias.
Mañana sábado 2 de febrero, día de la Candelaria, es cuando la afluencia de turistas es mayor.
Se esperan más de 50 mil personas que llegan de otros municipios y estados del país a celebrar a la Virgen de la Candela.
El alcalde de Tlacotalpan vía redes sociales mostró que los animales que participaron en la fiesta se encuentran bien.
