En las negociaciones con Estados Unidos ese país quiso imponer otras acciones, sin embargo, dio el beneficio de la duda a las propuestas de México, afirmó el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, ante los senadores de la República.
En ese sentido, dijo que la representación mexicana presentó de una manera más acelerada las medidas que ya venía discutiendo con Estados Unidos.
“El despliegue de la Guardia Nacional va a ser más pronto, al igual que la reestructura del personal del Instituto Nacional de Migración y la aplicación del plan para Centroamérica”, dijo.
Agregó que en México hay 25 mil migrantes esperando su procedimiento de asilo en Estados Unidos; además, reportó que hay otro equipo que está pendiente de los niños, porque los “polleros” los utilizan para aprovechar las leyes que favorecen a quienes viajan con ellos.
En su participación, la secretaria de Economía, Graciela Márquez Colin, dijo que lejos de ser enemigos de Estados Unidos, “somos sus socios y socios estratégicos”, al reiterar la postura amistosa del presidente López Obrador.
Confesó que empezamos a trabajar una lista de castigo para responder las medidas arancelarias, “y se comenzó a preparar esa lista para que México impusiera aranceles a Estados Unidos, mientras se alistaban para la negociación, pero no sobre aranceles, sino una negociación migratoria”, dijo.