El grupo editorial mexicano Fondo de Cultura Económica (FCE) cumple 85 años y desde su creación en 1934 se ha convertido en un punto de referencia “fundamental” para la literatura y la cultura, según destacó el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero.
García Montero, el escritor y director general del Fondo de Cultura Económica, Paco Ignacio Taibo II; la ex Alcaldesa de Madrid Manuela Carmena y el catedrático y ex Ministro de Educación Ángel Gabilondo participaron en una mesa redonda en el Instituto Cervantes con motivo de este aniversario de la editorial estatal mexicana.
El Fondo de Cultura Económica (FCE), que ha publicado desde su fundación más de 10 mil títulos sobre economía, humanidades, literatura, apostó por “nuevos rumbos” bajo la dirección de Paco Ignacio Taibo II, dirigidos a bajar los precios de los libros y llevar la literatura a los barrios.
Así, el nuevo responsable de la FCE, que llegó a la dirección hace 8 meses, aseguró que “la moda” en literatura le importa “un bledo” y cuestionó los bestsellers: ¿lo más vendido es un argumento supino de interés?”, se preguntó.
“Hay que cambiar mentalidades”, recalcó Paco Ignacio Taibo II, quien insistió en que “el libro es el único instrumento para construir utopías, el generador del pensamiento crítico”.
Taibo destacó la necesidad de “rehacer el puente” entre España y México, que “está roto por los dos lados”, como lo demuestra el hecho de que España apenas edite a autores mexicanos (desde el “boom” latinoamericano) y que las editoriales españolas sigan vendiendo allí en euros, lo que hace que los libros resulten demasiado caros.
El director del Cervantes recordó cómo el FCE se convirtió en un punto de referencia de buena parte del exilio que salió de España al perder la guerra en 1939 y señaló la necesidad de heredar su tradición para apostar por una cultura hispánica desde una perspectiva democrática “frente a los supremacismos que están acechando nuestra realidad”.
“Ni México ni España seríamos lo que somos sin el Fondo de Cultura Económica”, consideró Ángel Gabilondo, que agradeció a esta empresa que acogiera a los exiliados españoles del mundo editorial que salieron en 1939.
Por su parte, Manuela Carmena calificó de “inmenso invento social” la creación del FCE y se preguntó qué habría sido de los españoles de su generación sin esta editorial mexicana.
“Debemos reivindicar los inventos sociales”, indicó Carmena, que recordó las quemas de libros que se llevaron a cabo en España tras la guerra civil por considerarlos “hijos del demonio”.
Durante el acto, Luis García Montero anunció una importante donación de libros del FCE al Instituto Cervantes, una selección de títulos de autores, tanto españoles como latinoamericanos -entre ellos, muchos premios Cervantes-, así como de libros infantiles, que engrosarán los fondos bibliográficos de la red de 60 bibliotecas del Instituto, lo que facilitará su acceso por cientos de nuevos lectores en los cinco continentes.