A partir de esta fecha, a las instalaciones de este centro de estudios se les denominará Casa Matus 1925.
Ángel Trigos Landa develó la placa conmemorativa del 10 aniversario del CECC.
José Luis Couttolenc Soto.
A 10 años de su creación, el Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación (CECC) de la Universidad Veracruzana (UV) tiene presencia por la actualización de los temas y modos de investigarlos de manera creativa, y con sus líneas de investigación cubre aspectos amplios de la vida social, así como de las entidades colectivas que se configuran dentro de los campos y relaciones de poder.
Lo anterior lo manifestó Ángel Trigos Landa, director general de Investigaciones de esta casa de estudios, en el marco de las Jornadas Funerarias y de Otoño 2019, que incluyó la develación de la placa conmemorativa de la primera década de la creación del CECC, cuya plantilla de investigadores contribuyen al enriquecimiento de las memorias colectivas, asumiendo los discursos y prácticas sociales a lo largo del tiempo y en el presente.
Mencionó que el crecimiento de esta entidad universitaria, cuyo inicio fue con cinco investigadores y a la fecha cuenta con 10, ha sido notable obteniendo el reconocimiento por el Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), y en su más reciente evaluación alcanzó el nivel de “Consolidado”.
Por otra parte y en referencia a la casona que alberga las instalaciones del CECC, construida en 1925 por el ingeniero mecánico electricista Miguel Ángel Matus Bandala y que se ha convertido como un punto icónico de Xalapa, Trigos Landa anunció que a partir de esta fecha se le denominará Casa Matus 1925, en reconocimiento a las aportaciones que al desarrollo de la ciudad hizo la familia Matus Olvera, de la que algunos de sus integrantes estuvieron presentes en el evento.
El Director General de Investigaciones y el director del CECC, Homero Ávila, con la familia Matus Olvera
Reconocen la obra de Juan Rulfo
En el segundo y último día de las jornadas, Norma Esther García Meza, investigadora del CECC, y Daniel Domínguez Cuenca, del Reflexionario Mocambo de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) Veracruz, en homenaje al escritor, guionista y fotógrafo Juan Rulfo, dieron lectura a dos voces de fragmentos de dos obras narrativas del recordado escritor: El llano en llamas (1953) y Pedro Páramo (1955), que tuvieron como características la fuerza de las voces que están dentro de las obras de Rulfo.
El público asistente al evento apreció que conforme avanzaba la lectura las voces correspondían a personas que ya han partido, pero gracias a la fuerza de la oralidad con que se expresaban pareciera que aún continúan vivos. En el curso de las lecturas se pudo advertir un trabajo con la memoria.
