Lugar:
Fuente:
Universidad Veracruzana
  • La Coordinadora del Orquidario UV obtuvo este lugar por el proyecto “Un nuevo aroma en las montañas”, que busca impulsar el cultivo de la vainilla en comunidades rurales 

 

 Rebeca Menchaca García, coordinadora del Orquidario de la Universidad Veracruzana (UV), obtuvo el tercer lugar del Premio Terre de Femmes (Tierra de Mujeres), auspiciado por el Instituto de Francia y la Fundación Yves Rocher. 

Cabe mencionar que el Premio Terre de Femmes está destinado a financiar las acciones de mujeres ejemplares en favor del medio ambiente. Las galardonadas son distinguidas por trabajar en pro del desarrollo sustentable de su entorno y en la conservación de la naturaleza. 

El premio tiene 18 años de historia y está activo en 15 países: Francia, España, Alemania, Austria, Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Suiza, Rusia, Marruecos, Portugal, Turquía, Italia, Ucrania y México. 

En esta quinta edición en México se registraron 23 proyectos, de ellos fueron seleccionados tres: el primer lugar lo obtuvo Bárbara Arteaga Ballesteros, con su proyecto de transformación de la materia orgánica en materiales biodegradables; el segundo, fue para Eréndira Valle Padilla, por su proyecto de conservación de los lobos marinos, y el tercero, para Rebeca Menchaca, académica de la UV. 

La también investigadora en el Centro de Investigaciones Tropicales (Citro), comentó que el premio fue entregado por la postulación del proyecto “Un nuevo aroma en las montañas”, que tiene por objetivo impulsar el cultivo de la vainilla con grupos de mujeres en las comunidades de Baxtla y Piedra Parada, del municipio de Teocelo, Veracruz. 

Consideró que el cultivo de la vainilla se ha desplazado a otros lugarespor lo que una alternativa económica es sembrarla en los cafetales, contribuyendo así con un producto más de este agrosistema considerado como un bosque comestible. 

“Promocionar el cultivo de la vainilla en zonas altas, arriba de los mil metros sobre el nivel de mar, abre la puerta a una posibilidad debido al cambio climático que ha perturbado las zonas bajas, en donde cada vez es más difícil que prospere.” 

Este premio, dijo, a nivel profesional significa la vinculación con empresas que tienen iniciativas de conservación ambiental; lo más satisfactorio es trabajar con las comunidades y las empresas. 

“Es un logro en equipo, porque trabajo con otras catedráticas, estudiantes y egresados, quienes me han impulsado a continuar con el proyecto.” 

Rebeca Menchaca subrayó que en esta iniciativa participan por parte de las comunidades rurales: la señora Florina Martínez, de Baxtla, e Irma Moreno Catle, de Piedra Parada; las académicas Leticia Cano, Evodia Silva e Ileana Romero, así como los estudiantes y egresados David Moreno, Martín Barreda y Verenyce Morales. 

Mencionó que el jurado del premio fue integrado por representantes de la Fundación Yves Rocher, el Director General de World Wildlife Fund (WWF-México) y expertos en temas ambientales, quienes seleccionaron y premiaron a las tres mujeres que presentaron un proyecto con un propósito social y a favor del medio ambiente. 

La investigadora en la ceremonia de premiación

Por: Paola Cortés Pérez