El coronavirus, la guerra de precios entre Rusia y Arabia Saudita y la política petrolera del gobierno  constituyen una mezcla peligrosa que amenaza a Pemex y a las finanzas de México. La combinación del derrumbe de la demanda, los precios bajos y los altos costos que enfrenta la petrolera estatal agravan su situación, consideraron especialistas. A pesar de la transferencia por 5 mil millones de dólares que del Gobierno federal realizó a Pemex el año pasado , la petrolera sigue siendo la más endeudada del mundo, con cerca de 105 mil  millones de dólares de pasivos totales al cierre de 2019, lo que es atruible como responsabilidad a gobiernos anteriores. Ya se verá hasta qué punto ayuda el acuerdo de recorte de la producción logrado ayer entre la OPEP y países aliados para mejorar precios. La nota es de Marlen Ramírez en «Reforma».