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La Razón Online

La Academia hollywoodense anunció este martes que, temporalmente, aquellas películas elegibles para competir en los Oscar podrán haber sido estrenadas a través de plataformas de streaming y no en salas de cine; esto debido al cierre de éstas a causa de la pandemia de coronavirus.

“Hasta nuevo aviso, y solo para la 93 edición de los Premios, las películas que tenían planificado un estreno en cines, pero que antes estén disponibles en un servicio de emisión digital, podrán ser elegibles para las categorías de Mejor Película, los apartados generales y de especialidad”, informó la institución en un comunicado.

Para calificar, una cinta generalmente debe mostrarse en cine en el condado de Los Ángeles durante al menos una semana, tres veces al día. Sin embargo, la Academia reconoció que debido a que la pandemia de coronavirus forzó el cierre de los espacios, esas reglas ya no son factibles para los próximos Oscar.

“La Academia cree firmemente que no hay mejor manera de experimentar la magia de las películas que verlas en un teatro. Nuestro compromiso con eso no ha cambiado y es firme. No obstante, la históricamente trágica pandemia de COVID-19 necesita esta excepción temporal a nuestras reglas de elegibilidad de premios. La Academia apoya a nuestros miembros y colegas durante este tiempo de incertidumbre “.

La regla permanecerá vigente solo para la edición 93 del galardón, que será el 27 de febrero de 2021.

En otros cambios de reglas, la academia anunció que la mezcla de sonido y la edición de sonido se combinarán en una categoría, y los reproductores físicos de DVD ya no se enviará a los miembros con derecho a voto.

En la edición del 2019 “Roma” obtuvo 10 nominaciones en los Oscar, alzándose con Mejor Director, Mejor Película Extranjera y Mejor Fotografía. Previo a ello, algunos de los integrantes de la Academia, Steven Spielberg uno de los más notorios, pretendía restringir el acceso a la justa cinematográfica a los filmes estrenados vía streaming, como lo fue el caso de la cinta de Alfonso Cuarón, argumentando que la experiencia en las salas “es una parte fundamental del arte de los largometrajes”.