Lugar:
Fuente:
Universidad Veracruzana
  • Olivia Jalima Vega Corany, de la Facultad de Psicología, región Poza Rica-Tuxpan, fue capacitada por este programa del gobierno federal .
  • A través de “Manos solidarias construyendo esperanzas” espera promover la salud integral entre la población de su municipio. 
  • Con la participación y apoyo de la comunidad universitaria, organismos públicos y privados. 

 

Olivia Jalima Vega Corany, académica de la Facultad de Psicología, región Poza Rica-Tuxpan.

 

Claudia Peralta Vázquez.. 

Como resultado de su intervención en el programa de capacitación Promotores de Clubes por la PazOlivia Jalima Vega Corany, académica de la Facultad de Psicología de la Universidad Veracruzana (UV), región Poza Rica-Tuxpan, desarrolló el proyecto denominado “Manos solidarias construyendo esperanzas”. 

Dicha estrategia que espera implementar en un mediano plazo a favor de su municipio está orientada hacia la promoción de la salud integral y trabajo comunitario en contextos vulnerables, a partir del apoyo y participación de la comunidad universitaria, organismos públicos y privados. 

Olivia Jalima respondió en septiembre del año pasado a la convocatoria de Clubes por la Paz, en el marco de la Estrategia Nacional para la Prevención de Adicciones, de la Coordinación Nacional de Clubes por la Paz, en colaboración con el Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve), Secretaría de Cultura, a través del programa Cultura Comunitaria, y la Coordinación Nacional de Becas para el Bienestar “Benito Juárez”. 

El objetivo del programa es contribuir a la reestructuración del tejido social, e instruir a jóvenes universitarios y profesores para trabajar en territorio, promover espacios, estrategias de prevención y protección de las adicciones en diversas comunidades a nivel nacional. 

Para ello, fueron convocados estudiantes y académicos de 30 universidades del país, entre ellas la UV, para participar en este proceso de capacitación que se desarrolló entre octubre, noviembre y diciembre de 2020, y enero del presente año, convirtiéndose así en promotores de Clubes por la Paz. 

Tras ser aceptada, Olivia Jalima también se hizo acreedora a una beca económica con el fin de poner en marcha este proyecto basado en problemáticas globales y en la promoción de la salud integral, el cual espera implementar en breve de manera presencial, una vez que el riesgo por la pandemia disminuya. 

Mediante el enfoque de educación popular, el trabajo comunitario que se desarrollará a través de Manos solidarias construyendo esperanzas consistirá en facilitar información y procesos de formación niños, adolescentes, padres de familia, hombres, mujeres y adultos mayores. 

Por esta razón, se ofrecerán talleres sobre diferentes temáticas como por ejemplo: manejo de emociones y del estrés, crianza positiva, sexualidad responsable, con tal de lograr entre los asistentes un equilibrio físico y mental, así como de alimentación saludable para la prevención de enfermedades. 

También, de yoga infantil y para adultos, elaboración de un proyecto de vida, cine debate como herramienta para facilitar la formación de la sociedad en temas de inclusión, cuidado del medio ambiente y cultura de paz. 

Se busca ofrecer charlas sobre prevención de adicciones a niños y jóvenes que emplean diversas sustancias ilegales como: marihuana y cocaína; y legalescomo tabaco y alcohol, mismas que desencadenan otras problemáticas de tipo social. 

Otros talleres estarán enfocados al arte, dominio de ajedrez, futbol y volibol. 

“Me gustaría que cuando empiecen a implementarse se logren muchos cambios entre la población.” 

 

Raúl Homero López Espinoza, , coordinador de Responsabilidad Social Universitaria

 

La psicóloga dio a conocer que en estos tres primeros meses diseñará los materiales, medios para ejecutar el proyecto y tener acercamiento con la población. 

La idea, dijo, es que alumnos, profesores e integrantes de otras entidades académicas participen, así como voluntarios externos de Centros de Integración Juvenil, Jurisdicción Sanitaria y Ayuntamiento de Poza Rica. 

Se espera el respaldo de diferentes manos que quieran apostarle acambio, así planeé mi proyecto, mi Club de la Paz; la idea es replicarlo después en otros espacios y municipios, espero tenga un impacto positivo”, resaltó. 

Confió en el logro de los objetivos, toda vez que si las personas cuentan con salud física, mental y espiritual, habrá una sociedad más amigable. 

“Sólo a partir del conocimiento podremos asumir una postura mucho más ética para que el espacio en el que nos desenvolvemos sea más amigable y humano.” 

Por lo anterior, dijo sentirse muy orgullosa de haber participado en este curso de Clubes por la Paz, pues la estrategia nacional va encaminada hacia la reconstrucción del tejido social. 

Reconoció este esfuerzo y el hecho de haber considerado a los profesores para trabajar junto con los estudiantes porque son dos realidades distintas. “Vemos las problemáticas de manera diferente y nos impactan de formas diversas”. 

Comentó que, dentro del curso les facilitaron teoría y herramientas para el trabajo comunitario bajo la perspectiva de los procesos de educación popular. 

Asimismo, información sobre salud mental, adicción a diferentes sustancias, perspectiva de las juventudes, cultura de paz, cultura comunitaria y economía social. 

Por su parte, Raúl Homero López Espinosa, coordinador de Responsabilidad Social Universitaria (RSU), informó que la UV, a través de la Dirección General de Vinculación (DGV), dará seguimiento y apoyo a este proyecto. 

Destacó que la UV fue una de las 30 instituciones de educación superior convocadas por este programa, con el fin de fortalecer las habilidades de estudiantes y docentes para el trabajo comunitario, procesos de educación popular y organizativos que impulsen la prevención de adicciones, Cultura de Paz y acción comunitaria. 

Expuso que por cada universidad se otorgaron becas a 10 estudiantes y a un profesor. 

De la UV participaron en esta convocatoria 120 estudiantes de las cinco regiones, de programas educativos como: Química Farmacéutica Biológica, Pedagogía, Administración, Administración de Negocios Internacionales, Cirujano Dentista, Ingeniería en Biotecnología, Enfermería, entre otros, y sólo 10 fueron seleccionados. 

Puntualizó que esto responde a agendas nacionales e internacionales que tienen que ver con la Cultura de Paz, y en este sentido la UV ha contribuido a través de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) con acciones contundentes y específicas.