- “Uno de los grandes retrasos que tenemos como país es que no estamos patentando nuestro conocimiento”: Karla Cedano, presidenta de la Asociación Nacional de Energía Solar .
- Participó en la Semana de Innovación en Casa 2021, organizada por la Dirección General de Vinculación de la UV .
David Sandoval Rodríguez..
En las universidades es posible generar una innovación flexible y robusta por las características de estos espacios de trabajo, por ello es importante que estas instituciones se vinculen con el sector empresarial, recalcó Karla Cedano Villavicencio, académica del Instituto de Energías Renovables (IER) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La investigadora impartió la videoconferencia “Innovación basada en conocimiento para un México sustentable” dentro de las actividades de la Semana de Innovación en Casa 2021, organizada por la Oficina de Transferencia de Tecnología (OTT) y Emprende UV, adscritos a la Dirección General de Vinculación y la cual tuvo una asistencia de más de 230 personas.
Cedano Villavicencio enfatizó que el conocimiento es el único activo que cuando se comparte, crece; por tal razón, como integrantes de una institución educativa “debemos comprometernos a seguir compartiendo el conocimiento para hacerlo crecer y multiplicarlo.
”Es justo la riqueza de estar en redes lo que nos permite hacer innovación y fortalecer el desarrollo, así se pueden crear espacios que tienen impacto a nivel nacional”, detalló la ponente, quien también es presidenta de la Asociación Nacional de Energía Solar.
Señaló que un elemento fundamental que debe considerarse cuando se tiene la intención de emprender es hacerlo en armonía, que ello facilite generar colaboraciones virtuosas y que se contemple la inclusión de la sustentabilidad, para lograr un balance.
En general se relaciona el concepto de la sustentabilidad con el tema ambiental, pero éste tiene que ver con la economía, por ello se busca un equilibrio entre lo económico y lo ambiental, que a su vez tiene un importante componente social.
“Hay una gran dimensión de la sustentabilidad que pocas veces se observa y es la institucional, la que tiene que ver con las leyes y normas, porque es ese componente el que impulsa las posibles innovaciones tanto en el presente como las futuras”, comentó.
Existe un movimiento internacional para medir la innovación a nivel global a través de un índice que se presenta como informe anual de acceso abierto llamado “Global Innovation Index”, donde se ha ubicado a México en el sitio 56, mientras que Suiza, Suecia, Estados Unidos y Reino Unido se ubican en los primeros cuatro lugares.
En tal índice, los primeros tres países latinoamericanos son Chile, México y Costa Rica.
Cedano Villavicencio comentó que la innovación basada en conocimiento es aquella que se gesta en universidades, centros del conocimiento y escuelas, “aquí es donde se generan nuevas ideas, soluciones e incluso nuevos problemas, basados en el conocimiento académico”.
Se caracteriza por dos elementos: su flexibilidad, en el sentido que se tiene a las personas capacitadas que pueden generar o adaptar las innovaciones e incluso cambiarlas; y su robustez, que se refiere a que este tipo de innovación emerge con un valor agregado porque proviene de los espacios académicos, enriquecida por el trabajo que se realiza al interior de las instituciones y el respaldo que éstas brindan y ello la hace sólida y robusta.
Sin embargo, la ponente reconoció que “uno de los grandes retrasos que tenemos como país es que no estamos patentando nuestro conocimiento”.
Por tal razón, recalcó que los espacios universitarios como este evento fomentan la colaboración entre universidades y empresas, alianza que incide en el desarrollo del país.
Propuso aplicar el concepto de “innovatividad”, que está definida en artículos científicos como “una red de capacidades, actitudes, recursos materiales y tecnológicos, orientada por la apertura de oportunidades, la cooperación entre las personas articuladas en redes e instituciones”.