«En una sociedad democrática, el ejercicio de la crítica es indispensable. Me refiero a la crítica argumentada no a la visceral, a la fundada en datos y razones, no a la que se basa en conjeturas e insultos, a la que busca la verdad no a la que pretende un criterio a la fuerza, a la constructiva no a la destructiva. La crítica, entendida de tal manera, es toda una cultura, una manera de entender la convivencia dentro de la pluralidad». Lo escribe Guillermo Hurtado en «La Razón». Foto de «Por una Sociedad Plural e Integradora».