Al Pacino tenía que mencionar a las diez cintas nominadas a Mejor Película, pero en lugar de eso solo abrió el sobre y mencionó a la ganadora.
G. PACHECO.
En una noche definida por los momentos emotivos y las sorpresas cinematográficas, los Premios Oscar 2024 serán recordados no solo por los triunfos y las celebraciones sino también por un giro inesperado proporcionado por la leyenda de Hollywood, Al Pacino.
Al anunciar al ganador de la categoría más prestigiosa, Mejor Película, Al Pacino brindó a la audiencia un instante que quedará grabado en la memoria de los Oscars, reminiscente de episodios previos donde la anticipación y el drama se entrelazaron en el escenario.
Oppenheimer, el magistral drama dirigido por Christopher Nolan sobre el padre de la bomba atómica, se erigió como la gran victoria de la gala, acumulando un total de 7 estatuillas, incluidas Mejor Actor Principal para Cillian Murphy, Mejor Actor de Reparto para Robert Downey Jr., Mejor Director y, por supuesto, Mejor Película.
La película superó a destacados contendientes en una carrera reñida que incluía títulos como American Fiction, Anatomía de una caída, Barbie, entre otros, consolidando su posición como la obra cinematográfica más laureada de la noche.
El comienzo de la ceremonia no auguraba el éxito rotundo que Oppenheimer eventualmente alcanzaría, ya que inicialmente la película no logró convertir en premios ninguna de sus primeras cinco nominaciones. Sin embargo, Nolan y su equipo protagonizaron una remontada espectacular, asegurando una victoria tras otra hasta coronarse en la categoría reina de la noche.
La responsabilidad de anunciar el premio a la Mejor Película recayó en Al Pacino, cuya introducción al momento álgido de la noche estuvo cargada de su carismática presencia y un toque de humor shakespeariano. Sin embargo, el procedimiento estándar se desvió cuando Pacino, en lugar de nombrar a los nominados, pasó directamente a revelar el sobre y declarar a «Oppenheimer» como el ganador.
Este acto espontáneo condujo a unos segundos de silencio incómodo y confusión entre el público, recordando el icónico error de La La Land y Moonlight en 2017.
Imagen intermedia
La confirmación de Oppenheimer como ganador disipó la tensión, y los aplausos resonaron en el Dolby Theatre de Los Ángeles. A pesar del breve desliz, el equipo de «Oppenheimer» subió al escenario para celebrar el reconocimiento a su labor, mientras la audiencia ofrecía una ovación de pie, transformando el momento en una anécdota memorable de la noche.
La 96ª edición de los Premios Oscar no solo destacó por el dominio de Oppenheimer sino también por cómo un momento de incertidumbre se convirtió en una celebración del cine y el arte. Al Pacino, con su actuación inadvertida, recordó a todos presentes la humanidad y los imprevistos que pueden surgir incluso en los escenarios más grandiosos.
bgpa
Foto de USA Today,
