Lugar:
Fuente:
Agencia Imagen del Golfo

La Fundación del Conde tiene diversas y varias actividades a lo largo del año, pero son dos programas a los que se enfoca totalmente en estos meses: “Mírate y sé felíz” y “Mil al Cien”.

Aunque la fundación está enfocada al cien por ciento con el primer programa, no olvida al segundo, porque sabe muy bien que el beneficio a largo plazo para los que reciban esta ayuda es una inversión para toda la vida.

“Es un programa super ambicioso, nosotros tenemos pensado impactar en mil familias, ojalá se den las condiciones para que estas mil personas realmente aprovechen esta oportunidad y puedan cambiar su entorno social”. Comenta Marco Antonio Conde Pérez, fundador y responsable de la fundación.

“Mil al Cien” es un programa de becas que fue creado para apoyar y darle oportunidad a aquellas personas que vivan en una situación socioeconómica que no les permita cursar y costear una educación media superior y superior.
La convocatoria se lanzó hace unas semanas y se cerrará en septiembre, cuando inicia el ciclo escolar propiamente.

“Mírate y sé feliz” por su parte es un programa que ayuda a personas que necesitan cirugía estética y además es gratuito, hasta la fecha, se lleva ya un buen número de personas operadas de manera gratuita.

La fundación también apoya en actividades de temporada como en el día del niño, navidad y demás en los que se regalan juguetes, se hacen posadas y demás.

“Ahorita vamos a hacer una donación al instituto Dawn para apoyar a niños por medio de un convenio con el instituto allá en Xalapa en el cual el equipo de futbol americano los Mexicas, que pertenece a la Universidad del Conde S.C. donarán mil pesos por cada juego ganado, pero como son 5 categorías son muchos juegos ganados”, declara Conde Pérez también rector de dicho centro de estudios.

En la edición anterior de “Mil al Cien” se ocuparon las mil becas ofertadas a través de una convocatoria y lo que si es un hecho es que la selección para este año será un poco más estricta con mayores filtros.

“Hay gente que a veces no requiere la beca y tienen muy buen nivel socioeconómico e incluso superior a la media y que bueno, veo que aprovecharon la beca y es algo muy positivo, es algo muy bueno, pero creo que el fin primordial del programa llegue a esa gente que no puede aproveche la oportunidad, la gente que trabaja, estudia o que no puede continuar, esa es la gente que yo quiero que Mil al Cien llegue”.

La Universidad del Conde cuenta con programas de difusión buenos que abarcan México y Estados Unidos, convenios de participación para doble titulación, homologación y demás pero estos son lógicamente más costosos.

Pese a que estas becas de estudio son en línea y enfocadas a personas de escasos recursos en algunos casos, la principal pregunta es : ¿Cómo tomarán la clase en línea si por ser de escasos recursos no cuentan tal vez con internet o con PC?.

“Hasta el niño de cualquier secundaria tiene un teléfono inteligente y las clases se pueden ver por dispositivos inteligentes, tablets o teléfonos inteligentes, esa es una gran ventaja que antes no teníamos esa tecnología”.

A esto dijo, hay que sumar que los paquetes de datos no son tan caros y la red de internet ha avanzado muchísimo, y lo que “Mil al Cien” busca no es acostumbrar a la gente que tiene que recibir todo y en bandeja de plata, sino que también la gente debe hacer su parte, poner su grano de arena para recibir esa educación.

“La gente tiene que hacer su parte, tiene que buscar la manera, yo siempre le he dicho a un muchacho, ya no le pidas a tu mamá, ve a meserear, meserea un día, dos días y con eso pagas tu internet, pero tienes que hacer algo y tienes que aportar algo, porque sino entonces la gente no le da la valía o lo que realmente significa”.

Por ahora la fundación y la universidad buscan vinculación con organismos sociales que tengan alto impacto moral y social para que ayuden a la fundación para que los programas aterricen bien, buscando con esto ser más efectivos.