Hoy como cada 28 de diciembre se celebra el Día de los Santos Inocentes, una historia que se originó hace más dos mil años, de un trágico episodio, según el Nuevo Testamento de la Biblia.
Y pese a que el origen es religioso y de sufrimiento, a lo largo del tiempo esta fecha se ha utilizado para hacer bromas a la familia y amigos, incluso hasta los desconocidos que caen en los engaños.
En la zona de mercados de la ciudad de Veracruz, ya es popular colocar sobre el piso una cartera, un billete o una moneda con el objetivo de atraer a las personas; cuando se agachan inicia la burla y el ruido.
«Inocente palomita, hoy, Día de los Inocentes, te dejaste engañar», es una de las frases icónicas para reírse de la inocencia del otro.
Algunos cayeron en la broma.
«A la mecha, me agarraron de menso esta vez, yo pensé que era mi cartera porque la vi igual y voy y la recojo, pero nunca me imaginé que era una broma, me dio risa, también un poco de pena», dijo Jesús Méndez.
Los vendedores del mercado afirman que pese a que ya es un día muy conocido, todavía hay quien en su distracción cae en la trampa.
«Hay algunas personas que se molestan, otras les cae de a pelito, una vez casi me peleo pero son billetes que están dañados», afirmó El Tío Tuco.
El historiador veracruzano Ricardo Cañas, afirma que la brutal historia nace cuando el envidioso Rey Herodes I El Grande, quien al sentirse desplazado por el nacimiento de Jesús, organizó una matanza de niños, conocidos como los Santos Inocentes.
La fecha hoy dista mucho de su origen.
Las risas, las burlas y los engaños, tiene como referencia uno de los capítulos más oscuros de la Iglesia católica.
