Trabajadores de Tamsa demandaron a las autoridades federales dejen al Sindicato Unidad y Progreso resolver su elección interna y que no incurra en intromisión en la vida de ese gremio, en alusión a la toma de nota concedida a José Carlos Guevara Moreno \’el Profe\’.
Antonio Farfán del Cueto, quien habló en nombre de los manifestantes ataviados con el uniforme tamsero, afirmó que para ellos (quienes lo secundaron) el verdadero líder es Pascual Lagunes Ochoa.
Aclaró que Guevara Moreno no puede ser secretario general del sindicato porque ni siquiera es trabajador de Tamsa y consideró que haberle dado la toma de nota es una incongruencia de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Como integrante de Trabajadores Activos y Vigentes del Sindicato Unidad y Progreso de Tamsa acusó “argucias legaloides” y dijo que únicamente los trabajadores sindicalizados pueden elegir a su dirigente gremial, nadie más.
”Ni la empresa ni las autoridades del Trabajo federales o estatales, ni los gobiernos municipales, estatales o federal o cualquier otra autoridad deben o pueden decidir por nosotros (…), carecen de potestad que le faculte para imponer a nuestros representantes”, demandó Farfán.
Dijo que Pascual Lagunes no los envió a manifestarse a su favor y acusó a las autoridades federales de meter las manos en la vida sindical de Tubos de Acero de México, S.A.
Por ello demandó poner freno a lo que llamó intromisión en la vida gremial de los tamseros para beneficiar a Guevara Moreno.
“Exigimos a nuestro Comité Ejecutivo Nacional que proceda a dar parte y denunciar ante la Secretaría de la Función Pública, así como a dar vista a la PGR de las acciones que han realizado los titulares de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, así como al titular de la Dirección General de Registro de Asociaciones.
“Ambas pertenecen a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social federal; que se determine si existe algún incumplimiento o abuso de parte de los funcionarios en el caso específico de nuestra organización”, expresó Farfán del Cueto.
Advirtió que mantener dos dirigentes simultáneamente pone en riesgo la estabilidad de Tamsa y afecta a los trabajadores.
Farfán negó rotundamente que la empresa esté a favor de Pascual Lagunes y aseguró que los directivos son respetuosos de la vida interna del sindicato.