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E-consulta Veracruz

El Organismo Público Local Electoral (OPLE) no podrá dar seguimiento a las actividades de proselitismo que realicen en redes sociales precandidatos a la alcaldía.

En algunos casos se da “fuego amigo” y resultan ser cuentas falsas, o durante el lapso en el que se inicia la investigación y se pide información a los dueños de las cuentas, se baja la información.

Por lo que aunque se presenten quejas de parte de partidos políticos, es muy difícil comprobar que la cuenta, ya sea de Facebook o Twitter, es del aspirante a un cargo de elección popular.

Y en caso de que se trate de una cuenta auténtica, difícilmente se puede encontrar rastros de la propaganda política, reconoció la consejera electoral Tania Vázquez Muñoz.

Hay que recordar que recientemente el PRI presentó una queja ante el OPLE, por un video de autopromoción que subió a redes sociales el senador con licencia Fernando Yunes Márquez, quien confirma su aspiración a ser alcalde de Boca del Rio, y suceder a su hermano en el cargo.

En ese sentido, la consejera confirmó que resulta difícil acreditar algún delito electoral, como puede ser anticiparse al periodo de precampaña.

“El año pasado tuvimos varios casos de Facebook, y primero antes de emitir una sanción se comprueba que la cuenta corresponde al actor político que se dice”.

“El tema de las redes sociales y los fenómenos virales, lamentablemente así son virales, y cuando ya viene la medicina el padecimiento ya no existe o no hay rastro de ello”.

Comentó que los candidatos o precandidatos deben entender que las redes sociales no se deben usar como un medio para violar la ley, por el contrario, debe ser un foro para incentivar la participación ciudadana.

Destacó que es Facebook y Twitter los medios de comunicación favoritos de los jóvenes, y puede ser el medio ideal para convocarlos a votar.

La consejera consideró que no es propicio el regular el uso de redes sociales durante la precampaña, “las últimas estadísticas muestran que los jóvenes se expresan a través de las redes sociales (…) debe prevalecer la libertad de expresión, porque los jóvenes no tienen muchos canales”.