El cantautor británico Morrissey hizo de su regreso a la capital mexicana un acto anti-Trump, y afirmó que la única ventaja de construir un muro en la frontera entre ambos países es que el mandatario estadounidense estará fuera de México.
“Quiero decirles algo bueno del muro de Trump”, dijo el cantautor a las 20 mil personas que, de acuerdo con cifras de los organizadores, se reunieron la noche del viernes en el Palacio de los Deportes de la Ciudad de México.
“Lo bueno del muro de Trump es que ojalá éste lo mantenga fuera (de México)”, agregó el veterano compositor, quien dedicó al magnate la canción de su ex agrupación The Smiths, “Shoplifters of The World Unite”.
Moz, como le llaman cariñosamente sus seguidores, inició su presentación con un emotivo saludo en español: “¡Hola, familia!”. En diversas ocasiones ironizó sobre las políticas anti-inmigratorias del presidente electo de los Estados Unidos y sus planes de construir un “gran muro hermoso”.
Una imagen modificada de la tapa del disco de 2009 “Years of Refusal” mostró el rostro de Trump colocado sobre la cara del bebé que Morrissey carga en sus brazos. Los músicos que le acompañaban también portaron camisetas con la frase “Fu. Trump”, y en el bombo de la batería podía admirarse una bandera mexicana.
El astro de 57 años volvió a México después de que en 2013 canceló su participación en el Festival Vive Latino por motivos de salud.
Steven Patrick Morrissey, su nombre completo, se presentará el sábado en el Festival Roxy, en la ciudad de Guadalajara, donde comparte cartel con las agrupaciones británicas James y Placebo, el dúo australiano de música electrónica Empire of The Sun, el argentino Fito Páez, la colombiana Elsa y Elmar y el mexicano Caloncho.