El próximo 2 de mayo de 2017 iniciarán formalmente las campañas políticas para elegir a los alcaldes de los 212 municipios del Estado de Veracruz. Se trata de 212 “servidores públicos” que por un periodo de cuatro años, se espera pongan al servicio de los municipios sus mejores conocimientos, capacidades, habilidades y aportes para
contribuir en el bien común. El bien común debe prevalecer sobre cualquier otro tipo de interés personal o de partido.
Dado este contexto, nos parece oportuno destacar y recordar algunos aspectos
que los Obispos de Veracruz, en su mensaje del pasado 2 de abril de 2017, señalaron
sobre las próximas elecciones del 4 de junio.
Para los que somos creyentes, señalaron los Obispos, “la fe reclama de nosotros
asumir nuestro compromiso social”. Por lo tanto, como ciudadanos, “estamos llamados
a participar en el proceso electoral que está por comenzar para elegir a las autoridades
de nuestros municipios”.
La crisis permanente que estamos viviendo afecta la convivencia política y social
de las familias veracruzanas, por la persistencia de situaciones de corrupción, violencia
creciente, agravios a la dignidad y a la vida humana. Por ello, señalan los obispos de
Veracruz que “ante la impunidad y la insatisfacción de los anhelos de bienestar y
equidad, la PARTICIPACIÓN DE TODOS ES FUNDAMENTAL para posibilitar un futuro
esperanzador con las mejores garantías que nos permitan avanzar hacia una verdadera
transformación”.
Tendremos candidatos propuestos por partidos, alianzas o por grupos que
apoyan algún candidato independiente. Será responsabilidad personal hacer el propio y
libre discernimiento sobre los candidatos y sobre quienes los postulan. Habrá que
discernir “qué valores proponen, cuáles son sus convicciones y estilo de trabajo, su
ideología y los resultados que han dejado a lo largo de su trayectoria política o
ciudadana en el pasado”.
Esperamos que los candidatos y partidos o grupos políticos eviten el juego sucio
de los ataques o descalificaciones sin fundamento. Que más bien se distingan, por
propuestas claras, plataformas objetivas y realistas, cuyos compromisos estén en
posibilidad de cumplir.
Sobre los candidatos que participarán en esta Contienda electoral, los obispos
señalan que “esperamos que favorezcan una real participación ciudadana en la
elaboración de un plan de desarrollo comunitario, en la defensa, promoción y cuidado
de la familia. Ojalá se Impulse la solidaridad, el empleo, el trabajo digno, la salud y la
seguridad. Esperamos que sean transparentes en la rendición de cuentas de su
administración y destaquen por su servicio sencillo y respetuoso para con todos.
Entre las tareas impostergables que estos servidores públicos tendrán, “serán las
de garantizar la tranquilidad y seguridad de las personas y su patrimonio, la moralidad,
salubridad y orden público, la adecuada prestación de servicios públicos municipales; el
proveer de planes de desarrollo para crecimientos urbanos humanos y armoniosos que
promuevan la convivencia y eviten el pandillerismo y las adicciones”.
También señalaron que “el presidente municipal y su cabildo tendrán la gran
responsabilidad de vigilar por la vida y la salud de toda la población… Apoyados en
instancias de otros niveles de gobierno, tendrán la tarea de preservar el estado de
derecho, el orden la legalidad y los derechos humanos y la seguridad de todos”.
Que todos estos elementos nos permitan vivir un proceso electoral transparente
y ordenado, acompañado de una nutrida participación. Que todos los candidatos se
conduzcan a la altura de la responsabilidad y misión a la que aspiran.
Pbro. José Manuel Suazo Reyes
Director
Oficina de Comunicación Social
Arquidiócesis de Xalapa
