Hasta el momento se ha registrado la muerte de más de 40 manatíes, los ejemplares que han hallado vivos han sido atendidos por personal del Acuario de Veracruz, explicó el médico veterinario de este centro acuático, Alejandro de la Rosa.
A su vez, el Acuario de Veracruz ha colaborado en el monitoreo de muestras de la calidad de agua, sedimentos y vegetación donde confluyen los ríos Usumacinta y Grijalva, llamada la zona de la muerte.
Aún no se conocen las causas de la mortandad, sin embargo, detalló que en análisis preliminares de la calidad de agua se hallaron metales pesados y 54 mil coliformes fecales por cada 100 mililitros, cuando la norma indica mil organismos por cada 100 mililitros de agua.
Hasta el momento se han hecho necropsia a cuatro ejemplares de manatíes muertos, estas muestras han sido enviadas a laboratorios en Estados Unidos.