Lugar:
Fuente:
La Jornada / Elio Henríquez

Después de exhibirse en Los Ángeles y Nueva York, Estados Unidos, la exposición temporal La Reina Roja. El viaje al Xibalbá, se muestra en el Centro Cultural de los Altos de Chiapas, ubicado en el ex convento de Santo Domingo de Guzmán de esta ciudad.

El director del Centro, Raúl Durón, dijo que la exposición incluye el ajuar de la señora Tz’ak-b’u Ajaw, de siete piezas: La máscara, diadema, collar, pectoral, tocado, concha y figurilla, además de un elemento que recrea el cuerpo con las características físicas de la reina.

Recordó que el hallazgo de la Reina Roja, ocurrió en Palenque en 1994 y su restauración la llevó al Museo J. Paul Getty, con sede en Los Ángeles, California y luego fue exhibida por primera vez en el Museo Metropolitano de Nueva York; después regresó a México donde se exhibió con gran éxito en el Museo del Templo Mayor.

Señaló que en su recorrido por esta entidad se exhibió en el Museo Regional de Chiapas hasta mediados de noviembre de este año y antes de llegar a su destino final el Museo de Sitio de Palenque, se muestra en el Museo de los Altos de Chiapas hasta mediados del próximo mes de diciembre.

Manifestó que “tras años de investigación, los especialistas estiman que el ajuar es de Tz’ak-b’u Ajaw, consorte del Rey Pakal, uno de los más importantes gobernantes del periodo clásico de la cultura maya de Palenque. Era conocida como la señora de la sucesión porque parte de su tarea fue perpetuar el linaje de Pakal el Grande. Fue madre de Kan B’alam y K’inich K’an Joy Chitam, dos gobernantes de la región”.

Agregó: “Tz’ak-b’u Ajaw fue hallada cubierta por polvo de cinabrio, un mineral tóxico de color rojo, por lo que su descubrimiento ha sido conocido desde entonces como el descubrimiento de la Reina Roja, su hallazgo es uno de los más importantes del Proyecto Arqueológico de Palenque y su antigüedad data de 1300 años”.

Durón dijo que la máscara está compuesta por más de cien elementos de jadeíta y el collar es de jade. “Todo apunta a que es la esposo de Pakal, de la dinastía Pakal, al parecer tuvo cuatro hijos. Se trata de la esposa de Pakal porque se encontró en el sarcófago, cubierta de sinabrio, usado para decorativo”.

Comentó que “a través del esqueleto se genera el cuerpo de fibra de vidrio con elementos científicos de cómo era el tamaño de la reina y su dimensión; al parecer murió cuando tenía entre 50 y 60 años de edad”.

Expuso que en el interior se encontró un sarcófago de piedra cubierto por una lápida sin relieves y en él, un cuerpo que yacía en la tumba cuyo interior se cubría por completo de rojo cinabrio, ataviado lujosamente con una máscara de malaquita, tocado, diadema y un pectoral de cuentas de piedra verde, entre otros objetos.

Después de analizar las similitudes entre ambas tumbas, revisaron los registros epigráficos, como ADN y Carbono 14 y mediante análisis, el arqueólogo Arnoldo González Cruz determinó que los restos mortales de esta mujer son pertenecías a la señora Tz’aka’ab’ Ajaw esposa del famoso gobernante K’inich Janaahb’ Pakal, aseveró.