Dedicada a incautar redes de pescadores furtivos, una embarcación de la organización Sea Shepherd denunció que fue atacada en el Mar de Cortez por una treintena de lanchas rápidas cuando realizaban recorridos de vigilancia por lo que se considera el refugio de la vaquita marina.
Esta especie en peligro de extinción, de la cual estima la organización internacional que quedan 30 ejemplares, es endémica de este sitio que fue protegido declarándolo reserva de la biósfera, por lo que se extendió el polígono de prohibición de captura hasta el puerto de San Felipe, a 200 kilómetros de Mexicali.
En esa zona del Mar de Cortez —denominado también Golfo de California o históricamente Mar Bermejo— operan grupos de pescadores de totoaba, especie también protegida, cuya actividad ilícita ha sido minada por la presencia de la Armada de México y embarcaciones de ambientalistas.
El mediodía del jueves, el barco Farley Mowat fue atacado durante su recorrido de vigilancia del hábitat de la vaquita marina. En un comunicado se señaló que la embarcación sufrió una emboscada por más de 35 embarcaciones, cuyos tripulantes le arrojaron objetos y amenazaron con bombas caseras si no abandonaban la zona. Además los “totoaberos” realizaron un abordaje furtivo para hurtar pertenencias.
Hace nueve meses, en abril de 2018, otra embarcación de esta organización fue atacada por pescadores furtivos en la misma zona.