El pasado 8 de enero de 2019, durante la primera reunión del Consejo Presbiteral, el Sr. Arzobispo de Xalapa, Mons. Hipólito Reyes Larios presentó su primera carta circular de este nuevo año que tiene como finalidad “reflexionar sobre los acontecimientos y realidades más sobresalientes que, por la gracia de Dios, viviremos en el primer semestre para tenerlos en cuenta en nuestra tarea evangelizadora”. Destacamos brevemente cada asunto.
Mensaje de la Jornada Mundial de la Paz del 1 de enero de 2019. Dado que en el ámbito político nos encontramos ante nuevas autoridades estatales y federales, retomando el mensaje del Papa, el Arzobispo señala que “se necesita una “buena política que esté al servicio de la paz y que promueva la participación ciudadana”, “la caridad y las virtudes humanas son necesarias para una buena política al servicio de los derechos humanos”. La política se desvirtúa cuando se descuida el bien común y se privilegian los intereses personales buscando imponer los de algún grupo o ideología.
La Jornada mundial de la juventud. Los días del 23 al 28 de enero de 2019 será celebrada en Panamá, la Jornada Mundial de la Juventud. El P. Irineo Andrade, coordinador diocesano de los jóvenes, acompañará a un grupo de 70 jóvenes de nuestra Arquidiócesis que participarán en ese importante evento eclesial.
Oración por la pronta beatificación del P. Martín del Campo. El P. Martín del Campo es ya Venerable Siervo de Dios, con ello se le reconoce la Fama de Santidad y la vivencia de las Virtudes Heroicas. Ahora “es necesario unirnos en oración para pedir a Dios que nos conceda la gracia del milagro que hace falta, para alcanzar la beatificación de quien fuera entre nosotros un sacerdote santo y ejemplar, el cual nos legó una importante herencia de misericordia con los pecadores, solidaridad con los pobres y lucha eficaz contra los embates de los espíritus malignos”.
El amor y respeto a la vida humana. “La vida humana es el don más precioso que hemos recibido de parte de Dios, a través del amor de nuestros padres. Lamentablemente la vida humana es agredida en todas sus etapas. El aborto, por encima del cáncer y del sida, es la causa principal de muertes en el mundo, en 2018 fueron abortados casi 42 millones de bebés en el mundo”. En México, tenemos la amenaza de la legalización del aborto provocado en toda la República. Si a esto sumamos los numerosos asesinatos de todo tipo de personas, constatamos un desprecio increíble ante la sacralidad y la dignidad de la vida humana, que clama al cielo y cuestiona seriamente nuestras conciencias.
El tesoro de la sexualidad. Para quienes profesamos la fe cristiana, la sexualidad humana es un don maravilloso que nos identifica como hombre o mujer y nos ayuda a expresar el amor en un contexto de respeto y libertad. Sin embargo, actualmente se resalta desmesuradamente el placer sexual que provoca un tremendo libertinaje y una permisividad exagerada ya desde los mismos adolescentes. Si a esto añadimos los postulados de la ideología de género que han invadido muchos ambientes, incluyendo la educación elemental de los niños, tenemos como resultado un neopaganismo hedonista y relativista que deteriora la humanidad y la fe cristiana.
La valoración de la familia. “La familia es la célula fundamental de la sociedad, es el santuario de la vida humana, el ambiente propicio para desarrollar nuestras relaciones humanas fundamentales, para aprender a vivir los valores y las virtudes propias de todo ser humano, para promover la civilización del amor, para urdir adecuadamente el tejido social tan destruido en nuestros días”. Señala el Arzobispo que “es indispensable rescatar los valores tradicionales acerca de la familia cristiana, y no caer en la arbitraria promoción de ideas y prácticas que deshumanizan y banalizan la dignidad humana”. Nos congratulamos actualmente con todos los esfuerzos de la pastoral familiar y de los diversos grupos y movimientos eclesiales y sociales en favor de la familia.
Los nueve meses a favor de la vida 2019. Con la valiosa coordinación del Comité Diocesano de Ética para la Vida y la Familia, junto con la colaboración de las Comisiones diocesanas para la pastoral de la familia y para la pastoral de la salud, les hemos ofrecido una guía temática para orientar cada “mes de la vida”, de marzo a diciembre, durante el año 2019. Se trata de una propuesta de acción pastoral para nuestra Arquidiócesis de Xalapa. De esta manera, estaremos en sintonía para reforzar nuestro compromiso de defender, proteger y honrar la vida humana desde su inicio hasta su deceso natural.
La formación en nuestra Fe Católica. El Arzobispo señala como algo indispensable “que revisemos la educación en nuestra fe católica en todas las edades y etapas de nuestra vida”. Por ello señala que “es necesario que todos los que profesamos la fe católica conozcamos mejor la Sagrada Escritura y el Catecismo de la Iglesia Católica, junto con su respectivo Compendio, como fuentes fundamentales de nuestra formación en la fe”.
Visitas Pastorales y Proyectos. En este año 2019, se continuarán las Visitas Pastorales a los Decanatos y Parroquias para revisar la aplicación del Plan Diocesano de Pastoral, la formación y acompañamiento de las Comunidades de la Iniciación Cristiana, las instalaciones y territorios, los archivos con sus libros respectivos, la administración económica y las problemáticas especiales. Se habla además de apoyar los diferentes proyectos de construcciones, de erección de nuevas parroquias y la consolidación de algunos departamentos administrativos.
Que Dios nos mantenga unidos en la fe, la esperanza y la caridad como una sola familia arquidiocesana para ser mejores hijos de Dios, para crecer en el amor fraterno y para servir con alegría en la misión que nos ha encomendado.
Pbro. José Manuel Suazo Reyes